De nuevo llega uno de los actos institucionales más importantes para Casa Real en los últimos años. Desde hace varios años, Leonor es la gran protagonista de los Premios Princesa de Asturias. Nuevamente, esta gala de entrega de premios tendrá lugar en el teatro Campoamor de Oviedo. Los monarcas se alojarán en el Hotel La Reconquista, como todos los años. Una tradición que por el momento continuará un año más. Hasta la fecha es cierto que la princesa ha ido adquiriendo un mayor protagonismo, por ejemplo este año será la única protagonista en el atril, ya que su padre cerraba siempre la gala con un discurso, pero en esta ocasión recaerá en ella también. Poco a poco le van dando un mayor protagonismo, pero por ahora no se atreven a soltarle la mano.
Según fuentes cercanas a Zarzuela, se esperaba que Leonor acudiese en solitario a los Premios Princesa de Asturias, o por lo menos en compañía de su hermana, la infanta Sofía. Al final se apoyarán mano a mano cuando ella sea reina y la benjamina infanta. Sin embargo, Felipe VI y Letizia han creído que todavía no está preparada para ese reto. Aunque hemos sabido que no este acuerdo no ha sido satisfactorio al principio.
Felipe VI quería que Leonor presidiera la gala ella sola
Felipe VI creía que su hija ya estaba preparada para presidir la gala ella sola, sin su presencia. La ha visto este año mucho más madura y formada. Sin embargo, Letizia, siempre una mujer más controladora, calculadora y exigente, cree que no está preparada para este reto. Prefiere tener la situación bajo control.
Letizia y Felipe VI discutieron durante varias semanas que era lo mejor para su hija. Finalmente como siempre ha ganado la reina, pero esto ha creado un nuevo clima de crispación entre ellos. La relación entre los reyes es prácticamente nula. Solo coinciden en algunos actos institucionales e intentan hacer lo mejor por las niñas.
Leonor está centrada en su formación militar. Este año está siendo muy complicado porque para colmo tiene miedo a las alturas, y encima está con los alumnos de cuarto y quinto curso, donde la exigencia ya es mucho mayor. Está sintiendo la presión y este mes es uno de los más difíciles porque debe asistir a las clases y a los entrenamientos pero preparándose para el desfile de las Fuerzas Armadas y los Premios Princesa de Asturias. No puede con todo y ha sufrido un episodio de mucha ansiedad y estrés por la situación. Ha roto a llorar delante de sus compañeros y ha necesitado asistencia médica.