Letizia ha demostrado a todos, especialmente a Juan Carlos y a la reina Sofía, sus principales enemigos, que reina se hace, no se nace. Aunque no la querían en Zarzuela por ser una plebeya, ahora mismo hace sombra a la emérita, y es considerada la mejor reina de España y de Europa. Destacan su elegancia. En todos sus actos públicos, los medios de comunicación alaban sus estilismos, siempre muy acertada, la gran protagonista. Se aplaude que siempre apueste por diseñadores españoles. Incluso por firmas ‘low cost’, como Inditex, que combina con alta costura como Carolina Herrera, o su diseñador de cabecera Felipe Valera.
Si se recuperan fotografías de la reina en el pasado, no se parece en nada a la Letizia del presente. Es una mujer totalmente distinta. Tanto en forma de ser, como en físico, y eso que defiende que nunca se ha sometido a una operación estética. Unas informaciones que serían totalmente falsas porque se nota un importante cambio físico de una a otra. Destaca una rinoplastia, principalmente para mejorar su respiración.
Si ahora es una de las reinas más elegantes, antes sus gustos eran mucho más austeros. En aquel entonces seguramente conectaría con la ciudadanía. Letizia se enamoró con tan solo 17 años de su profesor de instituto con quien finalmente se casó, aunque unos años más tarde se divorcio. En ese momento era incontrolable. Un estilo a Victoria Federica, a la que ahora critica. Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz no podían con ella. La joven se fue a estudiar a México. Allí vivió una gran aventura. Se recuerda cuando vendía tabaco para sacarse un sueldo extra. O cuando hacía autostop en la Costa Brava, donde pasaba los veranos junto a su hermana, y practicaba el nudismo.
Letizia oculta las fotografías de su juventud
Hay poco material gráfico de esos momentos, solo han hablado amigos y amigas que coincidieron con Letizia en esos años de juventud y rebeldía. No obstante, siempre aparece alguna imagen que alguien tiene en su poder. Como la de la reina con sus compañeros de clase en la universidad.
Letizia aparece con el más puro estilo hippie. Con el pelo cortado a trozos irregulares y con algunas mechas rubias, un pañuelo y ropa cómoda y simple, unos tejanos y una camiseta de tirantes de color blanco. Con una maleta de cuero marrón como complemento donde guardar los trabajos de la universidad. Estaba sentada en las piernas de un compañero que a la vez la cogía con el brazo y recorría su cintura. Parece que la reina no estaba muy cómoda. Es la única que no mira a la cámara.
Con esta imagen Letizia deja atrás su aire de elegancia y seriedad actual. Aquellos eran años de rebeldía. Su etapa universitaria fue una de las más alocadas, disfruto como nadie, y nunca podrá olvidarla.