Los reyes Felipe VI y Letizia han dado un paso al lado esta semana, cediendo protagonismo a su hija Leonor en el primer acto que protagonizaba. La entrega del Toisón de Oro centró todas las miradas, aunque fue considerada de rancia y anacrónica por muchos.
La reina decidió repetir un Felipe Varela en rojo y granate, quedando en un segundo plano callada y sin destacar. Las muestras de cariño hacia la niña fueron evidentes y reiteradas, recordándose encara la preocupación de la monarca por el inicio de la agenda oficial de la pequeña.
EFE
Letizia sabe mejor que nadie la presión que vive la Casa Real, después de vivir un acoso mediático que todavía ahora sigue inspeccionando todos sus pasos con lupa. Incluso la prensa internacional la tiene entre ceja y ceja, llenándose las páginas de cotilleos de los países europeos de comentarios sobre ella.
La opinión más generalizada alaba su figura, afirmando que ha aportado a Felipe la dosis de realidad que necesitaba. Una plebeya sin sangre real convertida en Reina, vista como un apoyo: "Letizia ha hecho que ponga los pies en el suelo, es muy positiva para él. Los españoles pueden verse reflejados en ella en algunos aspectos", dicen el sueco Expresan y la italiana versión de Vanity Fair.
EFE
Ahora bien, han sido muchas las ocasiones en las que la prensa extranjera ha criticado a la Reina. Ya sea por unos looks demasiado exuberantes, unos brazos muy musculosos, por ser "rancia" o creída. Este argumento es uno de los más repetidos, reprochándole que parezca que se preocupa más de ir bien vestida que de demostrar calor a sus 'súbditos'. Look se hace eco de unas duras declaraciones del escritor de la biografía francesa de Felipe VI Le roi normal, Jean Chalvidant, que lo evidencian: "Se le puede reprochar su frialdad. Su preocupación por ser la más guapa, la más elegante, la más 'todo'. Tiene toques de vanidad".
Los medios norteamericanos Washington Post y The Daily Beast, y la británica de Glamour también hace tiempo que tienen dudas con respecto a ella.
Parece que las opiniones internacionales son de todo tipo. Con seguidores y detractores, la reina Letizia sigue en el centro de todas las dianas.