La princesa Leonor está a punto de cerrar una etapa clave en su formación militar. Después de navegar durante meses en el Juan Sebastián Elcano y completar 15 días de instrucción en la fragata Blas de Lezo, la heredera al trono está a punto de desembarcar. Lo hará este 13 de julio en Marín, marcando así el fin de su segundo año castrense.

Después, le esperan semanas de vacaciones. Por primera vez, no deberá reincorporarse hasta septiembre, cuando Leonor comience su formación en la Academia General del Aire y del Espacio en San Javier, Murcia. Un cambio importante en su rutina. Hasta entonces, tendrá tiempo libre. Mucho.

Elionor a Valparaíso
Leonor junto a otros guardiamarinas

Leonor se somete a un tratamiento desde hace meses

Tiempo en el que estará en Marivent, junto a sus padres, el rey Felipe VI y la reina Letizia, y su hermana, la infanta Sofía. Luego, disfrutará con ellos de unas vacaciones privadas lejos de Mallorca. Y también está previsto un viaje con amigos a mediados de agosto. Y entre tanto, Leonor también debe dedicar tiempo a mejorar su preparación física. Oficiales de Marín y de Zaragoza se han quejado de su bajo estado de forma y le han recomendado, una vez más, que siga un plan específico. De momento las intenciones están ahí. Otra cosa es que lo haga.

Pero también habrá espacio para una parte que cada vez cuida más: su imagen personal. Hace tiempo que Leonor, siguiendo los pasos de su madre, visita la clínica estética de Carmen Navarro, el centro de confianza de la reina. Un lugar que se ha convertido en referencia estética dentro de la familia real. Allí, madre e hija han encontrado el espacio ideal para mimarse. También ha ido la infanta Sofía en alguna ocasión.

Leonor i Sofia / Gtres
Leonor y Sofia / Gtres

Clínica de referencia para la reina Letizia

Los últimos retoques de la princesa se centran en la depilación láser. Una técnica avanzada, pero delicada, sobre todo para pieles con vello claro, como es su caso. Leonor está eliminando el vello en zonas específicas: axilas, piernas y otras áreas que requieren varias sesiones. En los últimos meses ha aprovechado sus descansos de la formación militar y sus breves pasos por Madrid para continuar con el tratamiento.

No se trata de un cambio drástico. Tampoco de una intervención invasiva. Es una apuesta por el cuidado personal. Por mantener una imagen pulida, acorde a su futuro institucional. Porque Leonor no es solo una joven de 19 años. Es la heredera al trono. Y cada detalle importa.