La infanta Elena se divorció oficialmente de Jaime de Marichalar en 2009, desde entonces no se le ha conocido ninguna otra pareja. Ha tomado la decisión de no rehacer su vida. Puede haber tenido alguna aventura con alguien, pero nunca han compartido techo ni se la ha vuelto a ver enamorado. Se centró en la crianza de sus dos hijos, demasiado rebeldes, y en su trabajo. La madre de Froilán y Victoria Federica es muy monárquica y borbónica, se casó con alguien de la aristocracia, aunque realmente se enamorase de un plebeyo, y no podría casarse con otra persona porque estaría muy mal visto en sus creencias.

Desde aquel divorcio, el primero en la corona, la infanta Elena ha dejado de generar interés a los medios de comunicación, aunque su vida amorosa antes de conocer a Jaime de Marichalar fue muy movida. Se la fotografió con aristócratas, empresarios y deportistas. Una de las personas más importantes en su vida fue Luis Astolfi, una estrella de la hípica que le robó el corazón en 1984. Ella tenía 23 años y él 27, fueron novios durante dos años. La hermana de Felipe VI quería continuar, pero él no se veía capaz de soportar el escrutinio de los medios.
El extenso currículum amoroso de la infanta Elena antes de conocer a Jaime de Marichalar
Más adelante, mantuvo un romance con el archiduque Jorge de Habsburgo. En aquel tiempo, la Royal cursaba estudios en París y solían encontrarse dentro de grupos para evitar rumores. Viajaban juntos con frecuencia; ella lo llevó a Madrid, el rey emérito lo invitó a Baqueira, y no mucho más. El joven tenía buen carácter y logró ganarse el visto bueno de sus padres.
Unos años antes de casarse finalmente con Marichalar, se la relacionó sentimentalmente con el arquitecto malagueño Alfredo Santos Galera. Se conocieron durante una noche de copas en Madrid, gracias a un amigo en común. Se dice que su relación duró unos dos años, aunque no llegó a consolidarse en algo más formal.
Mantuvo un breve romance con Cayetano Martínez de Irujo, pero este la dejó a los tres meses porque no se veía formando parte de la corona. Y según Pilar Eyre, la infanta Elena mantuvo una relación con el doctor Villamor, siempre fueron rumores, pero ella se atrevió a dar una confirmación.
“Se rumoreó que la infanta había estado liada con el doctor que había tratado al rey, que le pusieron unos clavos en la cadera. Pues este amigo me dijo que sí, que fueron novios Elena y el médico del rey. Es verdad”, dijo la periodista.
