Meghan Markle ha vuelto a acaparar titulares internacionales. La ex actriz y duquesa de Sussex no solo ha confirmado el estreno de la segunda temporada de With Love, Meghan en Netflix para el próximo 26 de agosto, sino que también ha abierto las puertas —aunque no literalmente— a su vida cotidiana junto a Archie y Lilibet en Montecito, California. “Estoy en el mejor momento de mi vida”, aseguró, dejando claro que su etapa lejos de la monarquía británica ha sido un renacer personal y profesional.
El tráiler oficial, presentado con la habitual puesta en escena de Hollywood, muestra una Meghan relajada, espontánea y hasta bromista. Entre cucharas de madera y charlas con el chef José Andrés, la duquesa confiesa una curiosidad que desató risas: el príncipe Harry no come langosta. Una anécdota mínima, pero que se viralizó en redes por el tono cómplice y cercano que destila el programa.
Meghan Markle y su nueva rutina con Archie y Lilibet cautiva a sus seguidores
Detrás de las cámaras, Meghan no escatima en mostrar que su mayor prioridad es la maternidad. En la serie se la ve enseñando recetas de galletas, pintando y jugando con Archie y Lilibet, en escenas que buscan transmitir una imagen de familia unida y sencilla, aunque grabadas con una producción que supera las 80 personas en el set. Por este motivo, ha optado por no grabar en su casa para proteger la intimidad de su familia, describiendo su hogar como un “refugio seguro” y valorando los momentos cotidianos, como acostar a Lilibet para la siesta o compartir comidas en familia.
Pero esta temporada no solo se centrará en su vida doméstica. Meghan ha reclutado a figuras como Chrissy Teigen, Tan France, David Chang y Jay Shetty, ampliando el espectro de invitados y reforzando su perfil como anfitriona de lujo. El resultado promete combinar conversación íntima, gastronomía y ese toque aspiracional que Netflix sabe explotar para convertir cualquier rutina en un espectáculo global.
El papel fundamental del príncipe Harry en la felicidad de Meghan
Pero no todo es espectáculo culinario. En sus declaraciones más personales, Meghan ha querido destacar el papel de Harry como esposo y padre. “Tener un esposo como Harry es una bendición”, afirmó, subrayando que su apoyo incondicional es parte esencial de la felicidad que vive hoy. Su relato pinta la imagen de una pareja sólida, capaz de resistir presiones mediáticas y críticas, enfocada en construir un futuro lejos del protocolo real.
Esta estabilidad sentimental se combina con un contrato multimillonario con Netflix, renovado por varios años bajo el sello de Archewell Productions. La apuesta es clara: seguir produciendo contenido que conecte emocionalmente con la audiencia y que refuerce la marca Sussex como sinónimo de independencia y autenticidad. Para Meghan, este es un capítulo en el que la balanza entre vida personal y carrera está perfectamente equilibrada. Sin comprometer la privacidad de su hogar, logra proyectar una narrativa donde la madre, la esposa y la productora conviven en armonía.
Con la cuenta regresiva hacia el estreno de With Love, Meghan, la expectación está servida. Los espectadores esperan una temporada cargada de momentos íntimos, risas improvisadas y pequeñas confesiones que alimenten el mito de Meghan Markle, una mujer que, lejos de palacios y coronas, afirma: “Nunca imaginé que en este momento me sentiría tan feliz y agradecida, y de verdad que lo estoy”.