Las presiones del ejecutivo de Mariano Rajoy han conseguido boicotear la presencia de expertos de diferentes países en unas jornadas internacionales sobre crimen organizado convocadas por los Mossos y el Instituto de Seguridad Pública de Catalunya, que se celebrarán la próxima semana en Barcelona. Representantes de los Estados Unidos, Holanda, Chile, de la embajada de Georgia y de la misma Fiscalía de Barcelona han hecho saber los últimos días que no asistirán, según ha podido saber El Nacional. El inspector jefe de la Policía de Munich, Philipp Forder, es el único representante internacional que ha superado la peinada del Estado al programa.

El martes pasado, 10 de octubre, llegó la baja del agregado policial de la embajada de Georgia, Shalva Shubladze. La comunicación la envió el ministerio del Interior, en concreto desde el Gabinete de Coordinación de la Secretaría de Estado de Seguridad, que encabeza Diego Pérez de los Cobos. "A la vista de los acontecimientos que se están desarrollando en Catalunya, el Secretario de Estado de Seguridad ha decidido revocar la autorización que en su momento se hizo sobre la participación del agregado policial de la Embajada de Georgia", se explica en el mail que no se molestar al esconder los motivos de la decisión.

Desde la misma dirección se había hecho saber el 27 de septiembre que el agregado policial había sido autorizado a asistir a las jornadas y que lo acompañaría un miembro de la Secretaría de Estado del ministerio, en concreto, de la subdirección de cooperación internacional.

Petició de visita interior

Al día siguiente, 11 de octubre, cancelaba su presencia el analista de Europol Adrian Ghita alegando "compromisos operacionales imprevistos". Hasta el día anterior, este miembro de Europol había estado intercambiando mensajes para concretar tanto su intervención en las jornadas como la logística de su viaje.

El 12 de octubre llegó la baja del investigador táctico sénior de la policía de Àmsterdam, Tibor Székely, que tenía que participar en una mesa redonda sobre Hurtadores reincidentes con alta movilidad. "A causa de circunstancias imprevistas, tengo que abstenerme de asistir a la conferencia del próximo 26 de octubre en Barcelona", explica el agente en un mail en qué se disculpa por el hecho de haber comunicado su ausencia en el último momento.

Un día más tarde, 13 de octubre, fue la Oficina Central de la Interpol de Chile que envió una carta para comunicar que el Subcomisario Eugenio Ríos, que tenía que pronunciar una conferencia, no podría asistir. En este caso, sí se ofrecía una razón de cariz presupuestario y para las responsabilidades del cargo. Un esfuerzo baldío, visto el contexto en que se producía.

Este miércoles, 18 de octubre, llegó el mail del Departamento de Policía de San Francisco, a través del cual el sargento Thomas Maguire hacía saber que su jefe le acababa de comunicar que había "problemas para obtener permiso" para que él y su compañero, el sargento Matthew Mason, pudieran viajar para participar en las Jornadas. El mail añadía que por motivos que le eran desconocidos su jefe había "rescindido" el permiso.

Maguire y Mason, los dos miembros de la División Especial de Investigación de San Francisco, tenían que presentar una ponencia sobre "investigación de grupos criminales dedicados a robos con fuerza en domicilios en San Francisco", que ha quedado anulada en el programa definitivo.

Fiscalía

Antes de esta cadena, había llegado la primera comunicación de baja, la de la Fiscal de Barcelona, Ana Magaldi, a quien se había solicitado autorización para que el fiscal José Luis García Martínez pudiera participar en las Jornadas. La respuesta de Magaldi llegó el 29 de septiembre, el viernes previo al referéndum del 1-O, y fue clara y directa: "le informo de que queda suspendida la colaboración que hasta ahora ha venido prestando la Fiscalía que dirijo a la Escuela de Policía de Catalunya".

Finalmente, las Jornadas internacionales sobre crimen organizado: delitos patrimoniales, empezarán el miércoles de la próxima semana. Con un solo representante internacional.