Mariano Rajoy no ha conseguido introducir ninguna alusión al proceso soberanista catalán en la Declaración de Roma, firmada hoy por los jefes de estado y de gobierno de la UE. El presidente del gobierno español ha fracasado en el intento de incluir alguna frase que hiciera referencia a cumplir la obligatoriedad de la ley a todos los Estados miembros. La semana pasada el ejecutivo anunció que estaba negociando con los otros países, para poder incluir un mensaje de aviso en el gobierno catalán.

"Aquí no se amenaza a nadie, aquí se cumple la ley, y todo eso figurará en la Declaración de Roma", decía Rajoy hace poco más de una semana en el Congreso. También añadió que el hecho de que algunos dirigentes catalanes hayan incumplido la ley, ha provocado que no se los quiera recibir en ningún despacho relevante de Europa. Este anuncio lo dirigió al portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, y también hacía referencia al hecho de que quería introducir la obligación de todos los ciudadanos de cumplir las leyes en sus estados.

Finalmente, sin embargo, en el texto no se ha hecho ninguna referencia a la petición personal de Rajoy, y lo ha justificado diciendo que la Declaración no habla de la situación concreta de nadie. Sin embargo el presidente español se ha mostrado contento del texto final porque, según él, deja claro el respeto de los países europeos para el estado de derecho. En realidad, la Declaración sólo hace referencia una vez, y al lado de otros valores genéricos. "Hemos construido una unión única con instituciones comunes y valores firmes, una comunidad de paz, libertad, derechos humanos y estado de derecho", indica el redactado.

El texto lo han firmado los líderes de los 27 países de la Unión Europea, excepto el Reino Unido. La Declaración de Roma subraya la unidad de Europa, y la voluntad de seguir avanzando en el proyecto europeo, a pesar del Brexit. Según la Declaración, los líderes se comprometen a conseguir una Europa segura y protegida de ataques terroristas, una Europa próspera y sostenible, una Europa social que luche contra la exclusión social y la pobreza, y una Europa mejor posicionada a nivel mundial.