El 2016 pasará a la historia de Seat como el ejercicio de consolidación de la recuperación con unos registros de récords históricos. Récord en beneficios, en facturación y en inversiones. La automovilística ha conseguido en 2016 el mejor resultado financiero de su historia al cerrar con un beneficio antes de impuestos de 903 millones de euros, con extraordinarios importantes por la venta de la filial VW Finance. Este beneficio después de impuestos se reduce hasta los 232 millones positivos si se descuentan los efectos extraordinarios de esta venta, lo que facilita la comparativa con los seis millones de ganancias del 2015, según ha destacado la firma automovilística durante la presentación de resultados.

Según el presidente de Seat, Luca de Meo, el volumen de ventas mayor, un mix de productos más alto y la optimización de costes han hecho posibles estos resultados históricos de la filial española del Grupo Volkswagen. En concreto, la compañía ha situado su volumen de negocio en el 2016 en los 8.597 millones, un 3,2% más, y el beneficio operativo ha llegado a los 143 millones de euros, en lo que supone la primera vez que Seat sale de los números rojos antes de impuestos en los 30 años que la marca lleva bajo el paraguas de Volkswagen.

Los 232 millones de beneficios netos antes de extraordinarios suponen en más "un éxito extraordinario", según De Meo, al igualar prácticamente los resultados a los obtenidos en el 2001 (233 millones). "Seat se ha convertido en una compañía sólida que ha pasado claramente de una fase de recuperación a una de consolidación. Y ahora Seat se está preparando para el desarrollo y el crecimiento. Llevaremos la marca a otro nivel", ha explicado.

Seat culminará en el 2017 la ofensiva mayor de productos que ha hecho nunca con la comercialización del nuevo Ibiza y el lanzamiento del Arona, los dos producidos en Martorell (Baix Llobregat), además del Ateca, que se estrenó en el 2016, y del renovado León.