Las llamas devoran la Ribera de l'Ebre. 6.500 hectáreas ya han sido quemadas en Tarragona y la cifra todavía será más espeluznante, a pesar de los esfuerzos de bomberos, campesinos, ganaderos, vecinos... incluso de una unidad de emergencias del ejército español desplazada a la zona. Uno de los peores de la historia, un verdadero desastre humano, ecológico y económico. Todo el mundo intenta ayudar. Todos menos los de siempre: Los que intentan sacar provecho del mal ajeno. Sí, ajeno, como lo siente Toni Cantó, más preocupado de hacer propaganda anticatalana y de exaltación españolista que de ayudar, o al menos, de no molestar. El valenciano ha intentado extender las llamas a las redes sociales utilizando la presencia del ejército: "Que los independentistas no se ofendan por la bandera de sus uniformes"

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

La España en color frente en un gobierno en blanco y negro. 🇪🇸❤️

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Imaginamos al de Cs en su casa, envuelto en una rojigualda tamaño Colón, frotándose las manos con la catástrofe y animando cual hooligan a los bomberos... de la UME (Unidad Militar de Emergencias). Seguramente es de los que piensa que "se lo merecen esos catalufos", una reflexión que demostraría la categoría humana del actor fracasado y político incendiario. Sólo hay que leer las reacciones de sus seguidores en Twitter, una verdadera tropa ultra que vomitan odio anticatalán, y que mezclan "churras y merinas" para justificar su discurso agresivo, deshumanizado y bien "garrulo".

incendio riber ebre - efe

EFE

Afortunadamente, el brote utlraespañolista promovido por Cantó ha sido combatido no sólo por catalanes, sino también por muchos españoles horrorizados con la magnitud del incendio y las duras imágenes que ven por televisión. Muchos le recuerdan que si el ejército está en Catalunya ayudando a extinguir las llamas es, aparte de por una cuestión de humanidad, porque es su obligación, ya que también lo pagamos los catalanes.

Incendio Tarragona EFE

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Convertir la solidaridad y sentido del deber en catalanofobia es una maniobra infecta sólo al alcance de mentes "privilegiadas" como la del de Cs. Ahora bien, si Toni y sus acólitos no quieren ver al ejército en Tarragona, hay otras vías. Pero eso es otra historia. Ahora lo que importa es apagar las llamas.