Los dos son presentadores muy queridos. Los dos tienen sesenta y pico. Los dos hace mucho tiempo que hacen programas, uno, toda la vida en TV3, el otro en diferentes medios. Los dos son muy futboleros, uno del Barça, el otro del Espanyol... Y los dos han sufrido este verano dos sustos mayúsculos que les ha podido costar la vida. Afortunadamente, los dos han salido adelante y ahora han estado en el Tot es mou de Helena Garcia Melero para explicarle y para conmoverla con sus palabras y sus lecciones de vida. Son Xavi Valls y Sergi Mas. El presentador del Onze sufrió un ataque cardiaco hace un par de meses, el 23 de junio, y Sergi, un ictus el 1 de agosto. "Estamos muy contentos con que estéis aquí, sanos y salvos", empieza sincera Helena.
El problema de salud de Valls ha sido más sabido, él mismo avisaba en redes de cómo le habían salvado la vida los servicios médicos que lo atendieron y anunciando su retorno el pasado lunes 25 a su programa, pero ciertamente, lo que ha sufrido Mas "poca gente lo sabía". Empieza tomando la palabra Xavi, que ha explicado cómo el día del infarto estaba en la Cerdanya y notó una molestia extraña, "y al volver a casa, a treinta minutos de casa, un dolor insoportable. No me imaginaba que era un infarto. Iba solo. Al final llamé a una ambulancia, que yo siempre decía: 'Yo, para llamar a una ambulancia, me tengo que estar muriendo'... Efectivamente, me estaba muriendo". Vinieron dos ambulancias, una medicalizada, pero era tan grave la cosa que no lo llevaron al hospital de Vilafranca... Helicóptero y hacia Bellvitge. "En el helicóptero vomité y mucho dolor. Allí ya fui consciente de que era una cosa del corazón".
Sergi, después de unos días en Formentera, vuelve a Barcelona, cena con sus hijos el 31 de julio, su cumpleaños, y al día siguiente sube hacia Andorra. 20h de la noche, "pijama en casa y estoy hablando por teléfono con una amiga. Durante la conversación noto, como si cogieras una aguja, un pinchazo en el corazón, un minisegundo. ¡Digo 'Hòsties!', y se me cae el móvil. Al cogerlo se me caía. Al final, acabo la conversación. Hasta aquí mi ictus, que yo no lo sabía. Ceno. Voy a dormir. A las 10h me levanto, cada mañana escribo un poco porque me gusta, y noto que sé cómo es la 'b', pero me sale como un buñuelo, como un niño de p3. No me asusto, pero pienso qué raro. Me ducho, un café, vuelvo a escribir, y seguía siendo una chapuza. El error fue pensar 'ya se te pasará'. Después de comer fui al hospital, 18 horas después del ictus".
Los dos han conmovido hablando de cuándo pensaron "¿por qué?, ¿por qué yo"?, pero sobre todo, con sus palabras sentidas, sinceras y directas. Unos consejos de dos personas que han visto la muerte muy de cerca, y que vale la pena tomar nota:
Después de la necesaria conversación, momento para compartir cómo han empezado temporada sus equipos. Y qué mejor que hacerlo jugando una partida de futbolín, evidentemente, con Xavi cogiendo los jugadores blaugranas y Sergi los blanquiazules. Barça y Espanyol están empatados en puntos después de dos victorias y un empate. Motivo para creer que este será una gran temporada. Y de optimismo, después de lo que les ha pasado a los dos, Xavi y Sergi van sobrados.
Nos sumamos a las felicitaciones y a los mensajes de calor a los dos. Xavi y Sergi, bienvenidos.