Polònia ha entrado en una doble fase espectacular: pasa de los 600 mil espectadores (650 mil y 23,8% de audiencia, el programa más visto de toda la TV) y Minoría absoluta ha abandonado las líneas rojas respecto los presos políticos y exiliados. Si la semana pasada por primera vez veíamos a Junqueras i Sànchez en el comedor de la prisión peleándose por un voto a cambio de albóndigas, ahora la crítica es más ácida que nunca con el poder. Los dos partidos del Gobierno sufrieron dos gags muy hirientes: la foto de Junqueras es lo único que sustenta toda ERC. Pero el gag El show de Torra ha levantado polvareda. Pintan a Torra y Puigdemont como dos enajenados del mundo real que se creen su mentira de un mundo irreal. El símil divertido con El show deTruman de Jim Carrey deja paso a medida que avanza el gag a dos presidents rodeados de maniquíes lejos de la realidad. Muy duro.
TV3
Tan duro que mientras el gag corrosivo de ERC no tiene ni un solo comentario, el de los presidentes Torra y Puigdemont se ha llenado de espectadores muy ofendidos:
Eso de faltar al respecto al MHP @QuimTorraiPla ya pasa de medida|tamaño. Aceptó una responsabilidad en un momento muy difícil y tiene un papel muy complicado.
— Marian ����#CridaNacional ||*|| (@marianjubany) 22 de marzo de 2019
Por|Para eso hace tiempo que no os miro: Una cosa es hacer humor (muy necesario). La otra muy diferente es la burla y el menosprecio|desprecio.
Vaig apagar la tele.
— judithcobeña guardia (@jcobegua) 22 de marzo de 2019
Este gag es vomitivo.
— floя������������ ����#AltsasukoakASKE (@floli297) 22 de marzo de 2019
¿dónde es|está la gracia?
— Cristina Freixas #EnsVolemVives �������� (@cristinafreixas) 22 de marzo de 2019
Toni Albà hizo la presentación de la Crida y a ERC no le gustó demasiado.
— Sara Sánchez ���� Crida N*68 (@saralidiaester) 22 de marzo de 2019
No se si me hace más risa el gag o los comentarios de los convergentes indignados.
— Marc de Llobera (@marcdellobera) 22 de marzo de 2019
TV3
El programa destrozó a Duran Lleida, Enric Millo, el juicio al procés, la CUP y a una familia independentista que pasaba por allí. Mientras Ciutadans y PP braman contra una TV3 proindepe, Polònia hace bien el trabajo. Torra se miraba al espejo. Cuando lo hace el independentismo no siempre se gusta.