31 millones de espectadores en sólo 3 días. Netflix acaba de pulverizar su propio récord con el estreno de "Criminales en el mar" (Mistery Murder), la nueva comedia de la plataforma, con Jennifer Aniston y Adam Sandler como protagonistas. Un dato espectacular que haría pensar en la calidad de esta cinta, aunque la crítica ya la ha bautizado como la peor del año. Parece que volver a ver a Aniston y Sandler, después de 8 años sin trabajar juntos, es un reclamo demasiado goloso para los espectadores, que son capaces de tragarse 100 minutos de tortura cinematográfica. Pero la verdadera noticia sobre la película es otra, al menos en España: Un país que queda humillado cumpliendo todos los tópicos de un país "de pandereta"
Netflix
La historia mezcla la comedia más simplona,aventuras alocadas y una trama "de misterio" que da "verngüencica". Un cóctel servido en diferentes escenarios de una exótica Europa, con España ocupando un lugar destacado, inverosímil y ridículo. Podemos ser más concretos: Los de Hollywood se ensañan con Málaga, punto de partida de las peripecias de los protagonistas, presentando a la ciudad, las infraestructuras, la cultura y a los habitantes de la ciudad andaluza con todos los clichés imaginables. Autobuses miserables, músicos insoportables, flamencas typical spanish, guías turísticos envueltos en la rojigualda, ciudadanos que responden al apellido de Gonzáles... Sólo faltaba la paella con chorizo de Jamie Oliver para acabar de completar la postal. Ya se pueden imaginar por donde han ido las reacciones de los espectadores más sensibles a todo aquello que ose caricaturizar a su "patria querida". También la de los que tienen un sentido del humor más flexible.
@yonomeaburro
#Criminalesenelmar con @AdamSandler y Jennifer Aniston, una comedia de suspense al estilo Agatha Christie, lleva, según Netflix, más de 30 millones de visualizaciones. La peli no está mal, te ríes, pero UNA VEZ MÁS, deja esta falsa imagen de España como país de pandereta #Malaga pic.twitter.com/IfZzlDkXYz
— Yonomeaburro ���� (@Yonomeaburro) 19 de junio de 2019
Criminales en el mar no es ni la mitad de divertida que ¡Game Over, Tío!, pero sí un distraído juego Agatha Christie de retórica Sandleriana y amargo poso de matrimonios en crisis...económica. Además reproduce, a su manera, uno de mis chistes favoritos de Ibáñez pic.twitter.com/N1hyP35HdD
— Carlos M. Mira (@CarlosMMira) 14 de junio de 2019
Después de ver En Netflix la película "crimínales en el mar ." Me pregunto .se creen realmente que en málaga vivimis como en los años 60? Que los autobuses de málaga son de la posguerra .que nuestro aeropuerto es una mierda .no es málaga ni de coña . Infórmense mejor 🤬
— Cristina Alcoba (@AlcobaCalcoba) 14 de junio de 2019
He viajado en autobús por Estados Unidos y allí los autobuses sí son tercermundistas (y carceleros) y, encima, más caros que en España. Curiosa parodia la de película 'Criminales en el Mar' (Netflix) sobre España 'made in America' https://t.co/11eBrLrFbp pic.twitter.com/8RCeWnuxri
— David Rubio (@Jos3_Rubio) 20 de junio de 2019
41. Criminales en el mar (Película).
— Todos locos (@Zhakey) 16 de junio de 2019
Una perdida de tiempo sin gracia, en realidad la culpa de verla es mía 😅 pic.twitter.com/l8YyYZYJho
Netflix
El sainete made in USA deja por los suelos a un país más próximo a la posguerra que al siglo XXI. La marca España, hundida por la película más vista de la historia (en Netflix). También por la peor de su catálogo. ¡Qué honor! Spain is not different. A ojos de la industria del cine, sigue igual que hace 70 años.