Los dos protagonizaban el escándalo del año. Bertín Osborne y Gabriela Guillén fueron dos de los nombres más leídos y escuchados de toda la prensa rosa. La paternidad de Bertín Osborne, a 69 años fue la noticia bomba del año, que culminaba con el nacimiento de su sexto hijo. Él lo ha dejado bien claro desde el minuto uno, no ejercerá como padre, de hecho, todavía no tiene ni el 'título' que le autoriza. El presentador español juraba y perjuraba que no era el padre de la criatura, pero, al pasar el tiempo, cada vez era más evidente. Ya no se podía esconder y hacer oídos sordos, el embarazo de su amiga especial no podía ser nada más que el fruto de una de las muchas noches de pasión. Desde el nacimiento del bebé, hemos visto al cantante de rancheras más cabizbajo que nunca, la vida le ha parado de dar golpes fuertes, pero finalmente parece que haya llegado el perdón de la otra protagonista. Bien, más o menos.

Bertín Osborne no ha empezado el año con muy buen pie. Se despedía del 2023 con el nacimiento (muy poco deseado) del bebé de Gabriela Guillénel cual le abría un nuevo abanico de quebraderos de cabeza de por vida, pero digamos que los primeros meses del 2024 tampoco le han ido demasiado a favor. El 3 de enero se despedía para siempre de su gran amigo íntimo Paco Arévalo, el cual moría de forma repentina a 76 años, una noticia dura, la cual Bertín Osborne no esperaba y, encima, tampoco pudo enfrentarse, ya que no pudo viajar para darle el último adiós. Fue en aquellos días cuando se contagiaba gravemente de la Covid-19, la cual le dejaba unas patologías de por meses. Cancelaba dos veces su concierto en Alicante, y ya hace casi dos meses que no sabemos nada de él. La prensa rosa y sus hijas están preocupadas, pero parece que en este tiempo de desconexión, Gabriela Guillén habría reflexionado sobre su relación con el presentador.

El robo de la sillita, una exclusiva, varios titulares y una demanda por el medio habrían sido algunos de los titulares que engloban resumidamente la trama entre estos dos. Pasaban de presentarse como amigos íntimos y especiales a ser ultra enemigos públicos. Gabriela Guillén explicaba su versión a ¡De Viernes!, mientras él seguía ignorando su paternidad. Pero, después de casi un año del inicio de esta telenovela, habrían sacado bandera blanca. La modelo puertorriqueña ayer publicaba un vídeo con un mensaje emotivo que tan solo podría ir dirigido a un destinatario: Bertín Osborne. "¿Perdonar es lo mismo que olvidar? La respuesta es rotundamente no. Yo perdono, pero no olvido. Y con eso reduzco al máximo la posibilidad de que esa persona me pueda volver a hacer daño. Y no perdono a esa persona por ella. Perdono por mí, porque necesito aligerar el equipaje. Porque para agarrar lo nuevo, yo necesito soltar lo viejo"

Bertin Osborne y Gabriela Guillen / Lecturas
Bertín Osborne y Gabriela Guillén / Lecturas
Gabriela Guillén i Bertín Osborne / Instagram y EP
Gabriela Guillén y Bertín Osborne / Instagram y EP

Un vídeo en que podemos interpretar qué significa el perdón por la modelo. Pero lo que parece un mensaje que quiera perdonar y dar la mano a la reconciliación, es un arma de doble hilo. Gabriela Guillén quiere dirigirse a Bertín Osborne para pasar página, pero no retrocede en su argumento: "Y cuando pienso en todo el daño que esa persona ha hecho, simplemente recuerdo esta máxima. La vida es como un restaurante: nadie se va sin pagar." Una expresión que llega justo cuando el presentador está pasando por su momento de salud más delicado, el precio más caro del karma. "La vida es un eco, la vida es un espejo, es un boomerang. El perdón es un acto de absoluto egoísmo. No se trata de la otra persona, se trata de ti"

Después de tantos y tantos capítulos de esta trama ya no sabemos cómo interpretar esta clara indirecta. Parece que Gabriela Guillén ha dado un paso adelante en toda esta historia, pero Bertín Osborne no responde, ni contesta, su stand by preocupa a todo el mundo.