En Sálvame les encanta destapar los trapos sucios de sus colaboradores. Las discusiones y las peleas son constantes, lo que entusiasma a los teleespectadores cotillas de Telecinco. Cada tarde recibe alguien diferente, y la última en hacerlo ha sido Lydia Lozano.
No tiene tanto carácter como los otros y a menudo se deja pisar. Seguramente por eso ella acostumbra a ser la diana de muchos de los dardos que disparan a los otros trabajadores del programa. Pues bien, ahora han ido más allá y le han dejado en evidencia.
Belén Rodríguez le ha traicionado y ha sacado a la luz el contenido de una conversación privada que habría mantenido con Lozano. La excusa ha sido que lo que le ha explicado le ha dejado "preocupada".
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Asegura que Lozano habría confesado que está arruinada y necesita dinero urgentemente. De hecho, la situación sería tan desesperada que habría decidido vender algunos electrodomésticos, incluso, para conseguir efectivo.
"Lydia no está pasando por su mejor momento. Se está intentando deshacer de un robot de cocina que tiene guardado en casa. Como no encuentra vendedor, lo digo aquí para hacerle promoción", ha empezado.
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Esta afirmación provocó que los otros colaboradores se mostraran muy sorprendidos al enterarse de la situación de Lydia. Kiko Hernández fue el primero en reaccionar: "No entiendo que estés todo el día trabajando en televisión y ahora vengas a vender un robot de cocina".
Lo más surrealista de todo llegó justo después, cuando Lozano estalló y negó la información de Rodríguez: "¡No quiero venderlo! Ni vendo el robot de cocina ni estoy arruinada". No quiso decir mucha cosa más, a pesar de los intentos de Paz Padilla de preguntarle si realmente necesitaba dinero.
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Ante este show, buena parte de la audiencia se preguntó si no sería todo un invento de Rodríguez para reírse de su compañera. ¿Era todo mentira? ¿O realmente Lozano le confesó que tiene problemas económicos y Belén lo hizo público sin consultarle?