Josep M. Mainat tiene claro qué siente y cómo se siente. Ya lo hacía cuando era miembro de La Trinca, después, como propietario de Gestmusic y ahora, afortunadamente, sigue haciéndolo. El productor televisivo es especialmente explícito cuando se trata de hablar del procés, de los presos políticos, de la independencia o de su lengua, el catalán. Una lengua que defiende con orgullo y por la que hace lo que haga falta para que llegue a cuantas más personas, mejor. Aunque le valga haber vivido situaciones esperpénticas, como una vez que le reprocharon que le hablara en catalán a su perro. Sí, sí, cómo lo oyen:
Mainat habla en el idioma que le sale del moño. A su perro, a su canario o a la vecina del quinto. Sólo faltaría. Y Mainat se pone las manos en la cabeza cuando ve menosprecios o falta de tacto de según quien con respecto al catalán. Ahora acaba de refrescar una petición suya que viene de lejos, y que está bien que se recuerde, a ver si alguien se da por enterado.
Josep M. Mainat / TV3
El receptor de su ruego, más que un ruego, una recomendación, más que una recomendación, un A ver si hacéis el rejodido favor de hacer lo que toca, la empresa DeepL, que "desarrolla productos de inteligencia artificial para expandir las posibilidades humanas y acercar las culturas", según ellos mismos se definen en redes. Hace un año, se vanagloriaron de que de entre sus virtudes, había que "Nuestra función de traducción también incluye chino y japonés. Traducid ficheros enteros de Word y PowerPoint con sólo un clic".
Josep M. Mainat / TV3
Mainat, muy educado, se dirigió a ellos con estos términos: "Hola. 10 millones de hablantes de catalán agradecerían que incluyáis el catalán entre los idiomas disponibles en vuestra excelente aplicación. Pensad que el uso del catalán es similar a algunos idiomas incluidos, como el checo, el danés, el sueco, el estonio, el letón, el eslovaco o el lituano".
Impecable. ¿A vosotros os han hecho caso? A él tampoco. Como si oyeran llover. Pero Mainat demuestra que puede ser una mosca cojonera cuando lucha por lo que cree. Y ahora ha vuelto a referirse a ellos, pidiendo la complicidad de sus seguidores.
No cuesta nada. Hacedle caso. A ver si esta gente se da por aludida de una puñetera vez.