Cristiano Ronaldo y Georgina Rodríguez están a punto de separarse. Esta es una de las noticias más comentadas del fin de semana del mundo del cotilleo internacional, después de que un programa de televisión portugués hiciera público el deterioro de la relación del futbolista y la modelo. Modelo, sí. La aragonesa ha saltado de dependienta en tiendas de lujo a influencer, celebrity y personaje goloso para marcas del sector de la moda. Ser la pareja y madre de uno de los hijos del jugador del Al Nassr, en Arabia Saudí, ha ayudado, sin duda. De hecho uno ha contagiado al otro su talante, costumbres y actitud ante la vida. La arrogancia va en el paquete, como ella misma ha demostrado en su documental.

Los humos de la de Jaca van disparados, de acuerdo. Pero digamos que es transversal: trata con soberbia a las amigas, al público en general e incluso a la suegra, Dolores Aveiro. La madre de CR7 es una bastión importante para el astro de Madeira, pero ha permitido que su novia la maltrate. Y parece que se arrepiente, tiene remordimientos. Unos que habrían crecido a medida que el futbolista ha ido detectando que vive, convive y más cosas con alguien que está compitiendo con él en fama, resplandor y demás. Este es uno de los motivos principales de la distancia creciente de CR7 y la Gio, se siente incómodo. El enemigo en casa. Alarma. El programa Noite Das Estrelas lo da por hecho, el anuncio de la ruptura es a tocar. Fin de la historia.

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Georgina y Cristiano se separan / Noite das Estrelas, CM-TV.pt
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Cristiano Ronaldo y su madre Dolores Aveiro / GTRES

Cristiano no es feliz en Arabia, cada vez más arisco y molesto

Esta, evidentemente, es una versión de la historia. Una que puede crear mucha expectación, pero vaya, que no tenemos la otra versión. El portugués calla sobre su pareja, a pesar de que sí que es cierto que se le ve crispado, arisco, de mala leche. Su carrera no va por el camino que pensaba, y que los rivales le canten "Messi, Messi" en los campos de fútbol lo revienta. No lo soporta. Ha estallado recientemente haciendo un gesto obsceno sobándose los atributos al marcharse de un terreno de juego. El escándalo, majestuoso: abogados del país han pedido su deportación. Si a todo eso le añadimos los supuestos problemas íntimos con una mujer "que solo va a centros comerciales a gastar, gastar y gastar" hacen que Cristiano no esté de muy buen humor.

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Georgina y Cristiano en Arabia Saudí / GTRES

La foto de Georgina con ropa ajustadísima que incendia Arabia Saudí

Nos queda analizarlo todo desde el punto de vista de Georgina Rodríguez, que vive en su mundo paralelo. Un mundo lleno de viajes, de sesiones de fotos, de promoción de productos, servicios y artículos diversos. Trabaja, curra, vaya. Nos parecerá más o menos esforzado y lo criticaremos más o menos en función del resto del personaje, pero es un trabajo. Uno en el que anuncia, por ejemplo, ropa de hacer yoga. Ajustada, para más señas, como la que luce en su cuenta en Instagram. 49 pares de ojos mirando dos imágenes bastante sugerentes con un sujetador deportivo: el resultado, que el mundo musulmán y Arabia queman. No importa que se las haya hecho en Madrid; pulsar el botón "traducir" de la plataforma permite hacerse una idea de cómo van los ánimos. Los suyos, por lo visto, son de tranquilidad e incluso de un poco de cachondeo. Si se está separando lo esconde bastante bien.

Georgina foto provocativa Instagram
Georgina quema Arabia / Instagram

Georgina pasa de todo. Va a su aire. Quizás demasiado y todo. Veremos qué pasa.