Las TV privadas han decidido poner a los líderes indepes en el Congreso en antena y hacerlos lucir españolidad. Laura Borràs en Cuatro demostrando que no tiene problema al ponerse una pulsera rojigualda y Gabriel Rufián en La Sexta aclarando que no tiene problemas con determinada concepción de España. Convocado por la productora de Jordi Évole enel programa Salvados, fue muy claro a la pregunta trampa de Gonzo; "¿Se siente español?":
¿Se sienten españoles?
— Salvados (@salvadostv) 24 de noviembre de 2019
"Yo no renuncio a Machado, ni a @Rosaliavt ni a @AlejandroSanz. Y si me dicen 'Viva España' respondo 'viva'", dice @gabrielrufian.#MásAlláDeMadrid pic.twitter.com/ZcAjEZljT6
Rufián: "Para mí la españolidad no es una bandera. Niego el mantra de que odiamos. Yo no renuncio a Cervantes, Machado, Rosalía o Alejandro Sanz. Si me gritan Viva España muchas veces contesto Viva". Las dos respuestas menos románticas son las del diputado vasco del PNV Aitor Esteban: "Yo me siento solo vasco y creo que hay una nación vasca que tiene derecho a decidir su futuro".
La Sexta
Populista o certero, el diputado de Teruel Existe Tomás Guitarte: "Esto me parece, con perdón, cosas de ricos. Nos parece filosofar. Nosotros necesitamos primero comer y luego filosofar".
La Sexta
El líder de ERC en Madrid ya está acostumbrado a recibir en twitter. Zascas cuando es hostil con España, zascas cuando es bienintencionado:
Yo no me oigo española. M'agrada Machado igual que me gusta Agatha Christie. M'agrada o no Rosalía, como|cómo me gusta o no ACDC. Oírme|Sentir, me oigo sólo catalana.
— Sara Sánchez����️���� (@saralidiaester) 24 de noviembre de 2019
Yo tambien respondo: "que viva España!, pero que viva lejos!"
— wakajawaka (@wakajawaka4) 25 de noviembre de 2019
Está claro que Rufián se refiere a Rosalía de Castro, su gesto mirando a Ana Pontón, no deja lugar a dudas.
— O voo da curuxa (@avonasacram) 25 de noviembre de 2019
Una frase populista que la podría haber firmado Revilla
— enrico rizzo (@kukuchumari) 24 de noviembre de 2019
El nivel de los invitados fue alto y demostraron que las minorías en el Congreso tienen mejores políticos que los grandes partidos. La audiencia fue mejor en Catalunya 11,7% que en España, 9,1%.