Ya hace tiempo que algunos dirigentes políticos se dedican a crispar a la sociedad para sacar réditos electorales. Albert Rivera paseando por Altsasu para provocar a los padres de los jóvenes encarcelados e Inés Arrimadas arrancando lazos amarillos de las calles de Amer, el pueblo del president Puigdemont, son dos ejemplos de manual.

albert rivera golpeo instagram

@albertriveradiaz

El trabajo bien hecho tiene recompensa y políticos como Rivera o Arrimadas pueden congratularse: la crispación es evidente. Lo han conseguido. Entre los que piden calmar los ánimos, Dani Rovira. El actor andaluz visitó ayer el plató de El Hormiguero para promocionar su nueva película, Taxi en Gibraltar, y de paso recordó también que está inmerso en una gira recorriendo los teatros de España con el monólogo Odio.

Él mismo explica que la obra denuncia a aquellos que han trabajado para fracturar la sociedad: "Estamos viviendo un momento de mucha ira, de mucho odio. La sociedad se ha dividido entre nacionalistas e independentistas". Nacionalistas españoles, se entiende. Y continúa: “Entre los de un equipo y los de otro, entre los que son de izquierdas y los que son de derechas. Y no nos estamos dando cuenta de que nos estamos separando un montón y estamos todo el rato enfadados”. La preocupación del actor andaluz por una sociedad cada vez más enfrentada es evidente.

dani rovira el hormiguero

Antena 3

Dani Rovira es conocido por azotar sin miramientos a los partidos de derechas en España. Incluso ha llegado a decir que se avergonzaba de ser español porque se hacen corridas de toros. Ahora intentará que su Odio traiga mucha concordia a todos los teatros del Estado.