Vicky Martín Berrocal ha vuelto a demostrar que la Navidad, en su casa, es algo más que una tradición: es una forma de expresión personal. La diseñadora ha presentado la decoración de su hogar acompañada de las mujeres que conforman su núcleo más íntimo, su madre Victoria, su hermana Rocío y su hija Alba, que la han ayudado a levantar un árbol que ya está dando la vuelta por las redes.
Un árbol... cubierto por un velo nupcial
La realidad es que nadie esperaba lo que Vicky tenía preparado para estas fechas. Y es que, en lugar de adornos clásicos como bolas, cintas o figuras, la diseñadora ha optado por cubrir el árbol por completo con un velo de novia. Solo luces cálidas lo acompañan. Nada más. Un gesto que ha provocado estupor, curiosidad y comentarios de todo tipo. Porque muchos se han quedado sin entender la idea, preguntándose por qué alguien envolvería un árbol con un velo nupcial, mientras que otros han alabado la creatividad y la carga emocional del detalle.
De este modo, Vicky ha querido rendir homenaje a su profesión, al taller donde ha construido tantas historias y al material que más ha marcado su trayectoria, el tul. Ese tejido etéreo que ha acompañado a cientos de novias que han confiado en ella para uno de los días más memorables de sus vidas. Su árbol, lejos de lo convencional, se transforma así en una extensión de su identidad artística.
Un guiño íntimo a su carrera y a sus novias
Y es que para la diseñadora, el velo no es solo un elemento decorativo: es un símbolo de agradecimiento. Un recordatorio de todas esas mujeres que han depositado en sus manos la ilusión, los nervios y la emoción de un momento irrepetible. En sus redes, Vicky lo dejó claro con un mensaje cargado de sentimiento: “El tul forma parte de mí y de todas las que me habéis elegido para uno de los momentos más importantes de vuestra vida”.
La realidad es que el árbol puede gustar más o menos, pero indiferente no deja a nadie. Su propuesta rompe con lo típico y confirma que, para Vicky Martín Berrocal, la Navidad también puede ser un espacio para contar quién es y de dónde viene. Así pues, su árbol cubierto con un velo nupcial se ha convertido en uno de los más comentados del año, uniendo creatividad, emoción y un sello absolutamente personal.