A T5 le gusta hacer llorar a la audiencia los viernes por la noche. Ya sea con los programas de Bertín Osborne (por razones obvias), ya sea con el 'Volverte a ver' de Carlos Sobera, la cuestión es que los espectadores agoten las existencias de pañuelos. El de Carlos Sobera es un espacio diseñado exclusivamente para hacer aflorar las lágrimas, en el que el drama es el protagonista. El último episodio tenía como reclamo a una pareja de cantantes de éxito en el estado español, al menos durante los primeros años de su carrera: los andaluces Andy y Lucas. Era la apuesta de Mediaset para competir con la final de 'Tu Cara me Suena' en Antena 3, pero no le hizo ni cosquillas: un 9'9% irrelevante frente al programa de Gestmusic, que arrasó: 24'6%. La llorera, en el despacho de Vasile.

Hacía tiempo que no se veía a la pareja en televisión, una reaparición que confirmó la espectacular transformación física de los miembros del grupo. Andy, el más delgadito, ha engordado considerablemente, mientras que Lucas parece estiradísimo. Pero no era una noche para fijarse en su aspecto, y sí en los dramas familiares que explicaron antes de encontrarse con su padre y su madre, respectivamente. Andy estuvo dos años sin hablar con él, al no perdonarle no haber estado junto a su abuelo cuando murió. Ya están reconciliados y pasaron el confinamiento juntos. Lucas, por su parte, explicaba el accidente gravísimo de su hermano y que lo dejó con un 76% de incapacidad después de muchos días en coma. Su madre se hizo cargo, pero la muerte del marido el año pasado la volvió a hundir. Las lágrimas inundaron el plató de Sobera, antes de que los artistas se reencontraran con sus familiares para sorprenderlos. Una faceta bastante diferente de la que nunca nos han mostrado.

Andy rúsula en Volverte en Ver T5

Andy llora en 'Volverte a Ver' / T5

Lucas rúsula en Volverte en Ver T5

Lucas llora en 'Volverte a Ver' / T5

Andy y Lucas cono sus padres en 'Volverte en Ver' T5

Andy y Lucas con sus padres en 'Volverte a Ver' / T5

Para redondear la escena, no podía faltar una actuación musical que también podía hacer llorar: una de las últimas canciones que han publicado, 'Toda la noche'. El cambio de registro del dúo es flojito, y lo que es peor: lo cantaron en riguroso playback. Fetén.