Las escandalosas conversaciones hechas públicas por el diario El Mundo sobre los encuentros entre Juan Muñoz, marido de Ana Rosa Quintana, y el comisario Villarejo, hablando de un tercero, un magistrado a quien supuestamente querrían hacer chantaje para cobrar unas deudas, han puesto a la presentadora de Telecinco en el foco mediático, aunque ella continúa de vacaciones.

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En el programa de Ana Rosa, tal y como hicieron en su día cuando estalló la detención de Muñoz, han vuelto a hacer como si nada y no se ha mencionado la noticia ni ayer, cuando se supo, ni en el programa de este viernes. Pero Quintana tiene motivos para estar intranquila, tal y como se preguntan en el periódico Digital Sevilla. Su nombre aparece en diferentes momentos de las conversaciones registradas, donde Villarejo, Muñoz y el cuñado de Ana Rosa -y hermano del marido- hablan de unos vídeos donde se vería al juez consumiendo drogas. "El CNI lo grabó farlopeando y yo me voy a volver a hacer con esa grabación, y claro, no le interesa a él salir en algún medio o en YouTube con unas periquitas y pegándose un tirito. Mira, ves... otro tirito más. Mira, mira, ahí se apaga la luz y se sigue viendo... se está despelotando el chico y tal... ​Si vemos alguna duda y se le cuelga en YouTube y a tomar por culo [...] Todo aquel que nos toca los cojones, mira cómo termina, ¿eh?".

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Pero entre estas apreciaciones sobre el magistrado y sus hábitos nocturnos, el nombre de Ana Rosa aparece en diferentes momentos, donde supuestamente se podría dar a entender que ella estaba al corriente de todas las actividades que hacía su marido. "Ana (Rosa) me decía que investiguemos a estos pollos", habría dicho Muñoz cuando se citó con Villarejo para contratar supuestamente a un extorsionador profesional. U otra: "Juan le comenta que Anita le pregunta si está todo en orden o tiene que saber algo. Villarejo le dice que está todo perfecto y continúan hablando".

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De momento, el juez que instruye el caso no se ha pronunciado, pero ya hay quien se pregunta cuál es el futuro de la presentadora conforme avancen las investigaciones. Habrá que esperar, pero el retorno al trabajo de Ana Rosa promete ser complicado a medida que se vayan sabiendo más datos o se vayan filtrando más conversaciones. La red, sin embargo, se teme que haga un Infanta Cristina: