Esta foto espectacular, preciosa desde el retrovisor de su coche, donde se ve detrás un Arco Iris maravilloso, la hizo hace diez años el bueno de Artur Peguera. El presentador de los deportes del fin de semana la hizo hace justo 10 años. Y ahora, diez años después, ha vuelto a regalar a sus fans en redes otra foto fruto de una imagen reflejada en un espejo. Un espejo especial y customizado que se encuentra en un lugar curiosísimo. Pero vayamos por partes. Ya hace un tiempo que desde En Blau les hablamos de una de las relaciones de pareja más bonitas surgidas entre dos compañeros de TV3, y más concretamente, entre dos compañeros de programa, el TN Cap de Setmana.
El periodista de deportes y su compañera Cristina Riba, copresentadora hasta ahora del espacio informativo al lado de Ramon Pellicer, empezaron una relación de pareja después de un tiempo coincidiendo en el mismo plató de los informativos. Como pasa en muchas otras profesiones, Artur y Cristina encontraron el amor en su puesto de trabajo. Y desde que se unieron sentimentalmente, la cosa va viento en popa a toda vela. La de Manresa, de 45 años, y el de Pont de Suert, de 61, a la mínima que tienen ocasión, como ahora, van arriba y abajo y demuestran la química que tienen no solo en plató, sino también fuera de él.
Y ahora ha sido de una de aquellas ocasiones, aprovechando que empiezan las vacaciones y que han podido hacer una escapada romántica juntos. Primera foto juntos, curiosamente, en las redes sociales de Artur. Una imagen preciosa, de un espejo con una A de anarquía pintada en rosa en una de las zonas más curiosas de Europa. La parejita ha ido hasta Dinamarca, hasta Copenhague, y allí hay un barrio, una especie de república independiente de mi casa, como dirían los de Ikea, una especie de Ciudad Libre, Christiania, un barrio de la capital danesa de unos 1.000 habitantes, parcialmente autogobernado. Christiania se estableció con un estatus semilegal de comunidad de vecinos que se autoproclama independiente del Estado danés, llena de bares, tiendas o centros culturales, con muchas paredes y superficies pintadas, y donde precisamente Artur y Cristina se han hecho una foto preciosa, con los dos cómplices y sonrientes, el uno al lado del otro.
Una imagen muy bonita de la pareja de enamorados, reflejados en el espejo, con una A de anarquía, pero también de amor, del amor de Artur y Cristina.