La hija de Antonio Banderas, Stella del Carmen, y su prometido, su novio con quien lleva mucho tiempo como pareja, Alex Gruszynski, ya son marido y mujer, ya se han casado. Los novios se han casado en una ceremonia en un monasterio de la localidad de Sardón de Duero, Valladolid, y con una fiesta en el exclusivo hotel Abadía Retuerta LeDomaine. ¿Por qué allí? Porque el actor malagueño ya había estado en un viaje anterior con amigos, de tour por España. El intérprete de La ley del deseo, La corte del faraón, ¡Átame!, Los reyes del mambo, Desperado, Entrevista con el vampiro, Two much, Evita, La máscara del zorro, la última de Indiana Jones y tantas y tantas otras, ha vivido uno de los días más felices de su vida, viendo cómo su única hija, que tuvo con Melanie Griffith, decía el "Sí, quiero" con su prometido.



Su hija tenía clarísimo que quería casarse en España, como detalle hacia el país de su padre: "Quería casarse aquí en cualquiera de las formas. Ha sido un poco el espacio lo que nos ha traído hasta aquí y después que contaba con la facilidad como para atraer a 200 personas y poder alojarlas sin dificultad. Lo que sí me gustaría es agradecer a la gente de aquí, de Castilla y de Valladolid y de los pueblos lo bien que se han portado con nosotros", decía emocionado un Antonio Banderas que también cogió el micrófono para dedicarle unas palabras a su hija y a su yerno. Lo que poco se esperaba Banderas es que entre estas gentes de Valladolid y alrededores, habría un vecino que decidió colarse en la fiesta sin invitación previa. Un vecino que tenía un objetivo muy claro.

Un momento de "máximo nerviosismo", tal como han escrito en Lecturas, por culpa de un fan del intérprete que de manera inesperada, ha irrumpido en el lugar de la boda sin que nadie supiera qué demonios hacía allí. Un hombre que llevaba un sobre de color rosa y que nadie sabía qué había dentro. Se trataba de un vecino de Peñafiel, que ha intentado entregar el sobre al actor. Dentro, había escrita una idea para hacer una película sobre la Pasión de Cristo: "Es una aventura, pero le veo muy cercano a la gente y he querido hacerlo. La idea me ha surgido por devoción", ha dicho el intruso a 'El norte de Castilla'. Finalmente, lo ha retenido el personal de seguridad del lugar donde se ha hecho la ceremonia. Muchos nervios, mucha tensión, pero lo que poco se podía imaginar es quién finalmente podría explicarle directamente a Banderas qué ha ido a hacer allí y por qué se ha colado.

Y es que Banderas, con la amabilidad que lo caracteriza, se ha acercado a él justo después de brindar con los medios y ha estado charlando unos momentos para que le explicara la historia. Lo que ya no sabemos es si la idea de película que le ha contado le ha interesado o no para llevarla a la gran pantalla (como ya hizo en su día Mel Gibson). Sin duda, sin embargo, Banderas ha tenido un detalle, otro buen gesto de una persona muy querida, de un padre de la novia que con su comportamiento ha podido seguir disfrutando de un día tan especial como la boda de su hija.