A Marrakech se la conoce como la ciudad roja por el color predominante de sus casas. Pero durante seis días, la catalogación cromática atribuida a la ciudad de Marruecos tuvo una gama mucho más extensa de colores. También estaba el azul cristalino de las descomunales y espectaculares piscinas. El amarillo del sol despampanante. El blanco de los neones. El negro de los platos de los DJ's. O el multicolor de las fichas de póquer que han hecho enloquecer a miles de personas en una fiesta sin fin. El centro neurálgico de Marrakech es la plaza de Yamaa El FNA, origen de la vida en la preciosa ciudad africana, el punto desde donde empiezan decenas de callejuelas que llenan el zoco de la medina. Pero durante los últimos días de mayo, su epicentro se desplazó unos metros, hacia la zona del complejo hotelero donde se celebró uno de los acontecimientos más esperados por sus fans, el Winamax Sismix Marrakech.
Gente de todas partes ha llenado los diferentes hoteles de la zona, con el Palace y el Es Saadi Resort en el centro del foco, en una cita que superó las expectativas. Durante unos días, los asistentes y algunas celebrities que tampoco se lo han querido perder, han disfrutado con todas las propuestas que han tenido al alcance. Sol, música, pool parties, fiestas temáticas en la discoteca Theatro, torneos de Beer Pong (una especialidad que consiste en ir encestando pelotas de ping pong en diferentes vasos de cerveza, y todo un acontecimiento entre sus cada vez más seguidores), noches de couscous y tajine, cocktails VIPS entre palmeras llenos de delicatessen y glamour, blind test musical, sesiones especiales con DJ's y diferentes torneos de póquer, con especial mención del main event, que ganó Issam Benhaddou, llevándose un premio de casi 94.000 euros, y que reunió a algunos de los mejores jugadores del mundo, como la catalana Leo Margets, la francesa Gaëlle Baumann, el italiano Mustapha Kanit o el belga Davidi Kitai. Pero también con el Battle Royal, el High Roller o el Monster Stack.
Y entre todos ellos, algunas celebrities amantes de todo ello. De las fichas y los tapetes, pero también de la fiesta y las múltiples opciones que el Winamax Sismix Marrakech ha ofrecido a los asistentes. Los youtubers Sergio Candanedo, a.k.a 'Un Tío Blanco Hetero' y Breixo Fernández, conocido como 'Breifr9', que tienen cada vez más followers y son dos de los nombres más destacados en su terreno, o los cantantes de rap Skone (José Miguel Manzano), Al Safir y Midas Alonso. También vimos a un amante reconocido del póquer, el presentador Manel Fuentes, siempre al pie del cañón cuando hay un acontecimiento de estas características y que renegaba cuando alguien con 'AQ' le echó de la partida cuando él llevaba 'AK'. Pero aunque te eliminaran del torneo, era imposible no sonreír en un acontecimiento como este.
Solo hacía falta que el bueno de Manel levantara la cabeza y viera todo lo que estaba pasando de manera paralela a la sala del casino donde tenía lugar el torneo. Y es que a medida que fueron pasando los días, el desenfreno, la alegría desatada y la fiesta total se iba apoderando del personal.
La piscina, llena de pelotas y flamencos gigantes. La cabina del DJ pinchando un temazo tras otro. Desfiles de equipos improvisados de fútbol americano, de bailarinas haciendo la danza de los siete velos o de integrantes de un circo, a los cuales se sumaban los asistentes. Todo el mundo con el bañador puesto y una copa en la mano. También dentro del agua. Alguien que se hace llamar One Eye Sanan chillando "¡Pol! ¡Pooool!" a todas horas. Deducimos que el tal Pol acudió y que es alguien que vale la pena, porque no paraban de oírse aplausos cuando él respondía a la llamada. Todo el mundo riendo sin parar. Brindando por lo que fuera: por la amistad, por el amor, por el trabajo, por la diversión. O por todo al mismo tiempo. Un grupo que improvisa en un rincón una timba con unos papelitos en vez de fichas con faroles imposibles. Pero en Marrakech, estos días en el Winamax Sismix, todo era posible. Incluso, ver al presentador catalán a un palmo de narices de un camello diciéndole que Tu cara me suena, o improvisando unas notas al piano en medio de un descanso.
Manel tocaba las últimas notas de un festival que ha traído música, diversión, juego y euforia a Marrakech y que seguro que hoy todos recuerdan con nostalgia después de haber vivido unos días inolvidables. Habrá que esperar hasta el próximo año para repetirlo. Los fans ya han empezado la cuenta atrás. Y para que no estén impacientes, apunten: en septiembre, una nueva etapa de Winamax en Bratislava. Quizás no hace el mismo sol que en Marruecos. Quizás pega rasca para meterse dentro de una piscina. Quizás (seguro) que no habrá camellos en el desierto. Pero lo que volverá a haber es buen humor, diversión, alegría y emoción. Ya se lo explicaremos cuando llegue el día.