Hace unos años fue, probablemente, el cantante español más famoso del país. En época de El Canto del Loco, especialmente cuando lanzaron al mercado el disco Zapatillas, Dani Martín no podía ni salir de casa. Un icono de la música pop española, un ídolo de masas, especialmente de jóvenes, un referente musical con la cabeza muy bien amueblada, cosa que, con los años, se ha acentuado: "Soy popular por mi música, no famoso por mi fama. Voy por la calle, voy al Corte Inglés, al FNAC, hago la compra... Ya viví el momento del éxito y el griterío. Prefiero mostrar la importancia de la salud mental que enseñar mi casa, mi coche o los abdominales que he conseguido en el gimnasio, sobretodo porque nunca los he conseguido".
Son palabras del músico madrileño a Laura Rosel en El matí de Catalunya Ràdio. Una conversación donde Martín ha vuelto a demostrar una vez más que tras el artista hay una persona con las cosas muy claras que no está para frivolidades.
Laura Rosel, con Dani Martín / @laurarosel, foto: @vdeventeo
El cantante presenta el disco "No, no vuelve" y de música, de sueños, del Atlético de Madrid y de la vida ha hablado con la periodista catalana.
Una Rosel que sólo viendo la publicación que ha hecho en redes sociales, reproduciendo unos famosos versos de un hit de El Canto del Loco, Puede ser, ya queda clara su admiración por quién ha tenido en frente este martes: "Con Dani Martín después de hablar de referentes, de hacerse mayor y de saber lo que eres (y después, correr a escuchar de nuevo todas las del Canto): 'Puede ser que la vida me guíe hasta el sol, puede ser que el mal domine tus horas o que toda tu risa le gane ese pulso al dolor. Puede ser que lo malo sea hoy'".
Dani Martín vuelve a los escenarios y lo hace en uno de sus mejores momentos personales y profesionales, sereno y eternamente agradecido a lo que le ha dado la vida... y a Catalunya, una tierra que adora. "Sigues llenado lugares como el Palau Sant Jordi, lleno, primer lleno después de la pandemia, ¿qué tal la sensación de volver a actuar delante de tantísima gente?", quiere saber Rosel.
Y Martín, profundamente conmovido por la respuesta del público catalán: "Un regalo. Me siento muy afortunado. El del sábado fue uno de los mejores conciertos de mi vida. Llenar el Sant Jordi es difícil. Con El Canto nos costó, y llenarlo 22 años después... es de agradecer. Sé que la gente, si viene aquí es porque realmente quiere".
Rosel incide en el amor mutuo entre él y los catalanes: "¿Te sientes querido por el público catalán?". Respuesta sincera y entregada: "Mucho. Creo que hemos tenido una muy buena relación desde el principio. Respeto mucho a Catalunya, tengo familia catalana también... es un lugar donde me siento en casa".
Y como en casa es como se ha sentido instantes después Laura Rosel cuando ha acabado la entrevista con Dani Martín, ha salido de los estudios de Catalunya Ràdio y se ha marchado a comer. ¿A casa? No. Hacía día para dar un paseo y enfilar Rambla abajo para ir a uno de los rincones más emblemáticos de Catalunya y de Barcelona.
Laura Rosel / @laura_rosel
Un sitio celestial donde no hay monumentos. Bueno, mejor dicho, donde también hay monumentos, pero no de los de piedra. Monumentos en forma de tortilla, de capipota, de garbanzos, de mejillones o de chipirones con judías. Después de una nueva jornada laboral, qué mejor que cargar pilas en el mitiquísimo bar Pinotxo del Mercado de la Boqueria, templo de los sentidos a cargo del no menos mítico Juanito.
Rosel ha caído rendida a uno de los platos estrella de su carta, los berberechos. Una obra de arte hecha plato, un trozo de cielo que si en foto tenían esta imagen MA-RA-VI-LLO-SA, imaginen lo buenos que eran en directo. Y Laura Rosel, rendida a sus pies:
No se puede añadir nada más. Haced el favor... Seguro que si a Rosel la ha acompañado Dani Martín a comer estos berberechos, no querrá irse nunca más de Catalunya.