Cada medida, nueva medida, propuesta o pensada de los gobernantes con relación a la pandemia, quizás está muy estudiada y tiene unos fundamentos o una razón de ser. Pero a menudo, no lo parece. Cuando menos, las decisiones gubernamentales en tiempo de coronavirus vienen acompañadas de muchas sombras. Y quien se encarga de visibilizar estos contrasentidos es, entre otros, Joel Joan.

joel joan tase

Joel Joan (TV3)

El actor, a quien de momento podemos disfrutar en Escape Room en los teatros (hasta nuevo aviso), está, como muchos de sus colegas de profesión, harto de pagar siempre los platos rotos. El sector de los actores y las actrices es, sin duda, de los más menospreciados y abandonados desde hace meses. Los teatros y los cines fueron los que cerraron la barraca antes que nadie. Después, los que volvieron a abrirla los últimos. Rodajes parados, meses de incertidumbre y cuando la cosa vuelve, más o menos, a ir tirando, el toque de queda vuelve a suponer un duro golpe.

Finalmente, el gobierno decretó que en el caso de los teatros, se pueda cerrar a las 22h y haya un tiempo para el público para volver a casa, acreditando la entrada del espectáculo. Peccatta minuta. Pero eso no sirve para apaciguar los ánimos del intérprete catalán. El autor y protagonista del excelente El crac, no considera, precisamente, que los que mandan sean unos cracs. Todo lo contrario. Porque después de indignarse por los horarios del toque de queda, ahora ha puesto el grito en el cielo por otra posibilidad que empieza a circular: que haya un confinamiento de fines de semana. La consellera de la Presidencia, Meritxell Budó, no descarta nada: "Tenemos que evitar como sea el confinamiento total del mes de marzo, siempre que sanitariamente sea posible. Tenemos que explorar diferentes escenarios y un escenario podría ser este". Joan, harto, ha vuelto a estallar:

¿Se puede hacer peor?, se pregunta el actor... Desgraciadamente, la pandemia va para largo... Muchas decisiones por tomar... Muchos nos equivocaríamos si Joel Joan no vuelve a indignarse más pronto que tarde.