Si hay alguien en Catalunya que de vez en cuando sacude las propias conciencias con su análisis, este es Joel Joan. El excelente actor y director catalán acostumbra a mirarse en el espejo, a él, y a todos nosotros como sociedad, como país, y desnuda las vergüenzas de cómo somos y cómo podríamos llegar a ser.
Joel Joan / TV3
Joan está harto de ver según qué comportamientos y decisiones. Está harto de que los catalanes siempre vayan pidiendo o vayan agachando la cabeza ante los comportamientos represores que llegan de las Españas impunemente. E ir haciendo. El pasado fin de semana ya estuvo calentito viendo la entrega de los Premios Gaudí y oyendo cosas que le molestaron molestar. Y eso que él fue un día, el presidente de la academia:
Joan habla de un país de pusilánimes. Pero todavía se ha quedado corto. Más adelante ha seguido definiendo qué tipo de país somos, un retrato doloroso, especialmente por la gran cantidad de situaciones que define él mismo de cómo nos quieren desde fuera y cómo, a veces, parece que lo consigan, viendo lo que hacemos o lo que dejamos de hacer los catalanes, desde todos los niveles, especialmente, los que tienen el poder de decisión. Una retahíla de definiciones que dibujan lo que en definitiva, para él es un "nano-país, cuando podríamos ser gigantes":
Enseguida, reacción masiva en la red, la mayoría, de personas que le dan la razón. De hecho, de todos los comentarios, Joel Joan ha escogido uno para retuitearlo, uno concreto y doloroso:
Pero hay muchos más:
