Aunque la palabra mono hace referencia al animal peludo con el que mantenemos cierta familiaridad evolutiva y un parecido a veces preocupante, el término mono como adjetivo, lejos de lo que cualquier estudiante de nuestra lengua en fase de iniciación pudiera pensar, significa bien puesto, decorado con gusto, a la moda, femenino o simplemente guapo.

Muchas veces los locales “monos” renuncian a cualquier tipo de propuesta gastronómica interesante, se centran más en la puesta en escena y se ciñen a los platos que gustan a tod@s, tipo: burrata, tataki, steak tartar, toda suerte de ensaladas, croquetas y bravas, casi siempre con algún toque oriental para que quede trendy, foodie o “mono”.

El Santa Gula es un sitio mono, muy mono. Pequeñito, paredes blancas, librería de madera color pino, el nombre del restaurante puesto en la pared, con madera y unas bombillitas sobrepuestas, y algo que en un sitio “mono” nunca, nunca, nunca, puede faltar: un espejo suspendido, en el que se escriben platos del día en tinta de rotulador blanca. Mono, muy mono. Y ojo, esto siempre va a gustos, pero no nos engañemos: lo mono es sinónimo de que gusta a tod@s... ¡venga ya! Reconocemos que a nosotros también.

Pero lo destacable del Santa Gula, este local con capacidad para 30 personas situado en la parte más pija de Gracia, la que toca a la Vía Augusta, apenas a un par de manzanas de la Diagonal, es que, sin faltarle ninguno de los ingredientes de los restaurantes “monos”, hace una propuesta gastronómica con un toque de atrevimiento. Y lo hace tomando algunos riesgos y llevando a las mesas, de forma sutil, nuevos  ingredientes de forma que sean probados por aquellos que arriesgan poco a la hora de pedir y atienden menos a la hora de comer.

Cochinillo segoviano deshuesado

Cochinillo segoviano deshuesado con mango caramelizado

Patatas bravas

Patates bravass


Bajo este toque propositivo del Santa Gula, probamos 9 platillos, incluyendo 2 postres, de los que consideramos que no os tenéis que perder el “Carpaccio tibio de calabacín  con queso de cabra”, sin duda con una más que simpática mezcla de sabores y texturas: el suave y fresco calabacín, el untuoso queso de cabra y los crujientes anacardos. Posteriormente, os tenéis que dejar seducir por los cremosos y caseros “Raviolis de setas y gambas con suquet al parmesano”. Aquell@s fans del tataki de atún deberán probar esta versión tempurizada, acompañada con una especie de glaseado dulce y que contrasta con la fresca y no picante espuma de wasabi. A los exóticos les recomendamos las vieras en papillote con curry verde y coco, es suave y no pica, pero te acerca a thailandia. Finalmente a los amantes del dulce, les recomendamos la Cheesake, un clásico bien ejecutado que no defraudará a nadie.

Carpaccio tibio de calabacín  con queso de cabra

Carpaccio tibio de calabacines, queso de cabra, ana… hierbabuena

Raviolis de setas y gambas con suquet al parmesano

Ravioli casero de setas y gambas con suquet al parmesano

Tataki de atún rojo en tempura​

Tataki de atu rojo en tempura con ensaladilla de m…o y aguacate

Cheesecake y espuma de crema catalana 

Cheesecake y Espuma de crema catalana con sorbe…e mandarina

Santa Gula, significaría subir a los altares uno de los 7 pecados capitales. Atrevido nombre para los "parroquianos" y atrevida propuesta gastronómica para los que sólo buscan un sitio “mono”.

Puntuación
Comida   Vinos
68   70
Servicio   Local
67   66
Precio   Estrellas Miguelín
30€   1 estrelles
Por persona: 4/5 platos por compartir + 1 copa de vino  

Dónde está Santa Gula?

Dirección: Plaza de Narcís Oller, 3, 08006 Barcelona

Teléfono: 931 85 76 49

Horario: De lunes a domingo de 13:00 a 16:00 y de 20:00 a 23:00

Web: www.santagula.es