La sesión de control de los miércoles en el Congreso no es el único campo de batalla de los políticos. Los sábados se tienen que zurrar por twitter. Rajoy aprovecha el fin de semana para hacer campaña electoral con actos populares. Ha ido hasta Zamora para promocionar los pequeños municipios. No les ha financiado mejores comunicaciones sino que se ha vestido con la capa zamorana de la comarca de Aliste. Rajoy ya tiene una pinta extraña en traje, pero con esta prenda es carne de meme.

rajoy capa zamora 2 efe

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EFE

Gabriel Rufián se debió aburrir el sábado por la tarde y ha buscado uno de aquellos símiles que triunfan en twitter. ¿Recuerdan la saga de Harry Potter? Todos los malos son de una de las casas, la Slytherin. Allí estudiaron Severous Snape, los Mallfoy y la familia Black. Y los del PP:

A la red le gustan los memes, las bromas y el cachondeo si son de la propia cuerda. Le han dicho a Rajoy tunero, templario, guardián del muro, illuminati, Drácula, sectario satánico, figurante de Eyes wide shut... Cuando la broma la hace un independentista ya no da risa. Y Rufián ha sacado el chaleco antibalas, que siempre tiene a mano:

Rufián tiene 574 mil seguidores en twitter. ¿Cuántos de ellos le detestan? Su varita mágica de Harry Potter es el móvil. Hace un tuit y todos pican y se pican. Desde que Pilar Rahola era diputada de ERC en Madrid nunca había habido un sucesor de su escaño tan detestado.