¿Son, estas chicas, unas expertas en el arte de encontrar vuelos baratos, o es que en su país el tren es extremadamente caro? Podrás juzgarlo tú mismo.
Dos amigas inglesas, una residente en Birmingham y la otra en Newcastle, han cogido cada una un avión diferente para encontrarse en... Málaga.
La distancia entre ambas ciudades británicas es de unos 320 kilómetros, pero los precios del tren las han llevado a quedar en una ciudad extranjera que tienen a unos 2.500 kilómetros de distancia.
Infografía: Daily Mail
La razón se puede entender. Para la chica de Newcastle, el precio de ida y vuelta en avión es una ganga (23 euros), y para la de Birmingham, también considerablemente barato (63 euros)... Gracias a Ryanair. Por el contrario, si no quisieran bajar a Andalucía a disfrutar del sol de invierno, tendrían que pagar unos 120 euros por ir en tren de una ciudad a la otra... en medio de la lluvia inglesa.
Para hacernos una idea, es como si un amigo de Barcelona y otro de Valencia tuvieran que viajar hasta Edimburgo para verse... y aún así nos quedamos cortos.
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Con todo, ya se ve que la Renfe de aquí no es la única red de trenes europea que podría funcionar mejor.