"Mi hija también sale y se divierte, pero ella es más lista, es mujer y es más lista, y no se la ve tanto como a su hermano". De un plumazo, Jaime de Marichalar dejaba a su hijo Froilán a la altura del betún y alababa las virtudes de su hija Victoria Federica en materia de fiesta y desenfreno oculto a los ojos de la opinión pública. Pero por lo visto, la pequeña de la infanta Elena no se queda corta a la hora de pasarlo tan bien como su hermano, que tiene el sanbenito de oveja negra de la familia.
Vic también se va de fiesta. La edad y el status de su familia hacen que a menudo haya participado en fiestas en discotecas de Madrid, con puestas de largo de compis que llegan a los 18 y con reservados en los mejores locales de la capital. Ahora, la sobrina de Felipe ha tenido una celebración especial: su amigo íntimo y que todo el mundo da por hecho que es su pareja, por mucho que el padre lo niegue, el torero Gonzalo Caballero, se va de gira taurina a México. El torero ha organizado una autofiesta de despedida en la casa que tiene la madre en Boadilla del Monte.
No faltaron otros novilleros, hijos de la jet set madrileña y Victoria Federica. Explica el diario El Mundo que "tan bueno era el ambiente que a la hija de la Infanta Elena no le importó que le grabaran en actitud cariñosa con el novillero amigo de su novio, Carlos Ochoa, tal y como queda reflejado en varios stories compartidos en Instagram".
Hubo besos, hubo muchas copas, y hubo mucha manduca. "Cenaron chuletones que cocinaron en la parrilla en una de las chimeneas de la casa familiar de Gonzalo".
Victoria Federica, de barbacoa con amigos para despedir a Gonzalo Caballero https://t.co/OBuayTTFiB pic.twitter.com/nSgaqr9OtY
— Revista ¡HOLA! (@hola) 2 de abril de 2019
Un festín en toda regla para que el chico se marchara con un buen recuerdo. Poco a poco, a Vic se la está viendo más de fiesta que a Froilán. Y mira que era difícil.