Los pequeños Borbones se están haciendo mayores. Lejos quedan aquellas tiernas imágenes que mostraban la familia unida con todos los primos rubitos y sonrientes. Los años pasan, y mientras Victoria Federica y Froilán hacen sufrir a su madre con sus vicios, los niños Urdangarin tampoco están haciendo muy feliz a Cristina.
La Infanta sigue intentando acostumbrarse al mal trago de los 6 años de prisión de Iñaki, pero ahora suma un nuevo quebradero de cabeza. La pesadilla no tiene fin, y si hasta ahora sólo le apoyaban los hijos, ahora parece que ni eso.
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Y es que esta semana han confirmado que el segundo hijo del matrimonio, Pablo Nicolás, se marcha de la casa familiar de Ginebra a sus 17 años. Todavía no ha llegado a la mayoría de edad, pero ha tomado la decisión de emanciparse a Alemania.
El adolescente habría fichado por un equipo profesional de balonmano de la liga de allí, una de las más prestigiosas. Su padre le habría inculcado la pasión por el deporte que le hizo famoso, con lo que el pequeño querría seguir sus pasos -al menos, deportivamente hablando-.
EFE
La ciudad escogida ha sido Hannover, pero ¿por qué? ¿Por qué irse tan lejos? El Español asegura que ha sido Iñaki quien ha movido hilos para que le ficharan. ¿Y eso? Resulta que el exduque es muy amigo del entrenador del primer equipo, ya que se trata de Antonio Carlos Ortega, un legendario jugador de balonmano español que invitó, incluso, a su boda con Cristina. Además, Urdangarin también conocería al entrenador del equipo juvenil en el que competirá su hijo. Iker Romero, otro conocido del vasco.
¿Cómo será la vida de Pablo Urdangarin, a todo esto? El medio afirma que se desplazará a una zona residencial de la ciudad alemana y que la vida deportiva del pequeño tendrá como base el pabellón de la escuela primaria Gudrun Pausewang Grundschule. Dicen que es un humilde polideportivo en el que entrenará por la tarde, con lo que podrá estudiar por la mañana sin problemas.
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Parece ser que el equipo es conocido por ser muy familiar, y que toda la urbanización de clase alta está volcada en ellos. De hecho, las gradas siempre estarían llenas de vecinos aplaudiendo.
A buen seguro que empieza a hacer equipo pronto con los compañeros, que ya habrían dicho que tienen muchas ganas de entrenar con él. ¿Le veremos aprovechando el anonimato que tendrá en Alemania para salir de fiesta? ¿Acabará siguiendo los pasos de Froilán?