Entre los resúmenes del año, uno de los más fáciles es el del rey Juan Carlos: se ha operado. Nada más. Su papel es triste, apartado de la Corona tras judicializarse sus negocios con Corinna, un caso empantanado en la Audiencia Nacional sobre posible blanqueo de capitales y fraude fiscal. El secreto de su ostracismo tiene un nombre: Letizia. El rey Felipe nunca habría tenido la osadía de apartar a su padre si no se viera empujado por su esposa. Letizia tenía muchos reproches para cobrarse y el digital El Español da un repaso de las razones de Juan Carlos para detestar a su nuera. Letizia, así ha dejado caer a Juan Carlos.
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Fuentes próximas al rey, amigos y conocidos, han hablado con la periodista Cristina Coro y ponen en boca del monarca los agravios cometidos por Letizia. El primero, apartarlo de la heredera Leonor, que ni lo citó en los dos primeros discursos, en Oviedo y Barcelona: "Fue un detalle tan feo. Él se ríe y no le da importancia, pero en una cena que tuvimos unos días después hablaba con tristeza del tema". El segundo es una comida de despedida en junio tras una corrida (de toros). Fueron sus dos hermanas Pilar y Margarita y su hija mayor Elena con Froilán y Victoria Federica, pero nadie más. Los amigos explican: "Le dolió mucho que no se acercaran ni su hijo ni sus nietas. De su nuera no esperaba nada, ni lo espera",
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El tercer ataque sufrido por el octogenario Juan Carlos es cuando le confía a su hijo que quiere ir abandonando la vida oficial pero sin oficializarlo. La puñalada fue que "El equipo de Felipe decidió hacerlo público, aprovecharon para expulsarlo definitivamente de la foto oficial. La idea de Juan Carlos era que si su hijo le necesitaba ahí estaba él. Con el anuncio, esa posibilidad quedó arruinada. Y esto le dolió enormemente". Jubilado a la fuerza, nunca más intervendrá en ningún acto oficial "No quisieron darle la oportunidad de dudar sobre su jubilación y lo dieron como un hecho a toda la opinión pública".
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El rey emérito cumpliá 82 años el 5 de enero, la noche de reyes y quizás el día de la investidura. No participará en ningún acto más. La mano que le ha movido el trono es la de Letizia, que ya tiene previsto cuál será el último acto en que Juan Carlos será el centro de atención. Lo último que le queda por hacer al rey.