Juan Carlos I siempre ha sido muy amigo de Francisco Franco. Se siente muy agradecido a que le nombrase rey de España. Ha sido su sucesor y él es quien se encargó del proceso de transición. Hace cincuenta años que falleció el dictador y cinco décadas que el marido de la reina Sofía heredó el trono. Aunque hace ya más de una década que tuvo que abdicar generando un gran revuelo, obligado por su hijo Felipe VI por las polémicas que le rodeaban. Y no solo eso, cinco años más tarde tuvo que aceptar el exilio en los Emiratos Árabes, como si fuese un rey apestado. Se sintió humillado.
Al emérito lo único que le beneficia de residir en los Emiratos Árabes, o por lo menos de tener su dinero allí, es el régimen fiscal que beneficia a las grandes fortunas. Sus dos mil millones de euros en patrimonio están a salvo. Muchos se preguntan cómo llegó Juan Carlos I a atesorar esa gran fortuna, y Francisco Franco tuvo mucho que ver en el inicio.
Juan Carlos I se hizo de oro gracias a Francisco Franco
Juan Carlos I ya heredó el trono con una importante fortuna entre sus manos, y es que el primer negocio que le hizo rico lo llevó a cabo en tiempos de dictadura, cuando se formaba para rey. La persona que devolvió la democracia a España se forró gracias al caudillo.
Habría que situarse en 1973, durante la famosa crisis del petróleo, cuando todavía era un príncipe y estaba bajo la tutela del caudillo. Juan Carlos I firmó en aquel entonces un acuerdo con Arabia Saudí para cobrar comisiones de los barriles que los Al Saud vendieran a España, por ello siempre han tenido muy buenas relaciones con los árabes.
Las comisiones se situaban entre 1 y 2 dólares por barril y aquel acuerdo fue amparado por todos los Gobiernos que habría después hasta 1996. Teniendo esto en cuenta y que un petrolero de 200.000 toneladas lleva entre 1.400.000 y 1.600.000 barriles a bordo, de ahí salieron los inicios de su fortuna. Luego entró en varios negocios y regalos millonarios que le hacían por favores y por el simple hecho de ser el rey de España.
