La reina Letizia ha puesto fin a unos días en México que han dejado momentos muy comentados. Este lunes llegaba a un país muy especial para ella, donde vivió durante seis meses mientras cursaba un master en los años 90. El viaje oficial solo ha durado tres días, pero la monarca se lo ha pasado muy bien. Prueba de eso es el baile poco protocolario que se marcó con el rapero de The Black Eyed Peas, mostrándose más desinhibido que nunca.

Ahora la aventura ha acabado, y Letizia se ha despedido bastante compungida. Fue ella la encargada de pronunciar el discurso de clausura de la cumbre de la unión internacional contra el cáncer, instando a los políticos a comprometerse más en esta lucha y calificando México como un lugar donde siempre se encuentra "como casa".

En esta ocasión volvió a apostar por su diseñador de cabecera, luciendo un vestido que ya había llevado en Japón. De terciopelo, con botones y en color burdeos a conjunto con los zapatos, lo acompañó de un abrigo rojo.

EFE

Y de este conjunto, a otro de más atrevido que generó muchas críticas el día  que lo estrenó. La Reina ha rescatado una falda en azul con una apertura frontal combinada con un top drapeado.

EFE

De camino ya hacia España, Letizia cierra este episodio de su agenda y se prepara para todos los actos que lo esperan.