Leonor, acompañada de su hermana pequeña y sus padres, vivió este miércoles su día grande en Caldes de Malavella en la entrega de los premios Princesa de Girona que ella presidía. Han sido unas horas donde la hemos visto a ella y a la infanta Sofía con tres modelitos cada una, todos fallidos, donde ha hablado catalán, como ha hecho anteriormente, y donde hemos visto cómo se ponía en los pies unos zapatos de tacón, cosa que no le vimos a su hermana pequeña, pero más alta que ella. De esta manera, Letizia conseguía que sus dos hijas parecieran de la misma altura.

Leonor y Sofía en los premios Princesa de Girona / GTRES
Leonor, Felipe, Letizia y Sofía en los premios Princesa de Girona / GTRES

La protagonista del día, bien cobijada como siempre por su familia, subió al escenario para pronunciar su discurso de agradecimiento y dar los galardones a los premiados. También, como viene siendo habitual, hizo lo mismo su padre. El rey Felipe siempre toma la palabra en este acto, para ponerse más trascendental que su hija y hacer el habitual speech agradeciendo a las autoridades presentes y llenándose la boca de buenas intenciones. Normalmente, cuando el monarca hace uno de sus discursos, le suele acompañar su mujer Letizia. Quizás harta de oír a su marido el mismo discurso, una y otra vez, cambiando cuatro cosas, como si fuera un disco rayado, ha hecho que en estos premios Princesa de Girona se haya visto una escena, como mínimo, curiosa.

Leonor, Felipe, Letizia y Sofía en los premios Princesa de Girona / GTRES

Ha pasado cuando Felipe estaba presentando a los dirigentes, autoridades y políticos presentes en el acto. Borbón, tras el atril, iba hablando. Y normalmente, cuando él habla, todos callan. Todo el mundo le escuchaba. Especialmente la primera fila, la más visible y protocolaria ante cámaras. ¿Todo el mundo? No. Había alguien que pasaba olímpicamente de lo que él estaba diciendo: su mujer Letizia. Una colaboradora habitual de TV3, la experta en imagen del Tot es mou, Patrycia Centeno, se ha fijado. Y se le ha entendido todo cuando ha utilizado una contundente expresión para comentar la escena donde Letizia pasa de Felipe mientras habla con su hija Leonor: "Letizia sudando de lo que tenga que decir el rey". No solo eso, sino que ha añadido una boutade muy bien encontrada que ha sido aplaudida con las orejas por los republicanos y que no habrá hecho gracia a los monárquicos que se envuelven con la rojigualda a la mínima que pueden. Dice Centeno de Letizia y su gesto: "Otro capítulo más de indepe infiltrada".

Después de los premios Princesa de Girona, Felipe ha continuado con los actos institucionales. Este jueves, recibiendo en audiencia al presidente mundial del Grupo Fujitsu, Takahito Tokita. Un acto donde ha vuelto a hablar y donde todo el mundo le escuchaba atentamente y le hacía caso... y es que Letizia, hoy, no estaba.