Los daños causados durante el famoso domingo de resurrección en la catedral de Palma, donde se escenificó la nefasta relación entre Letizia y la reina emérita, Sofía, siguen activos. Y si la actual monarca no había dejado claras sus intenciones hacia su suegra (utilizando esta semana la misma ropa que llevaba en aquella tensa jornada), ha vuelto a estirar la cuerda sacando a Sofía de un acto de inauguración al que había estado vinculada desde su creación en 1998: La inauguración de la exposición Angelis de la fundación Las edades del hombre, en Lerma, Burgos.

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Un nuevo gesto de desautorización y premeditado de Letizia, que parece obsesionada para arrinconar a Sofía y sacarla de la mayor cantidad de actos públicos como sea posible. Y además, haciéndole daño en una cita importante para la reina de origen griego. Todo parece indicar que se trata de la respuesta al papel protagonista que recuperó Sofía durante el viaje oficial a Argentina de Felipe y Letizia, con tres actos oficiales en una semana. Según leemos en Jaleos, en las apariciones de la emérita "volvieron a poner de manifiesto su gran popularidad, algo que según personas cercanas a Letícia, le molesta muchísimo a su nuera"

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Este medio ha bautizado a Letizia como La Rencorosa, quién se apresura por recuperar la agenda oficial de la casa real y volver a poner Sofía en un segundo o tercero plano. Letizia es la estrella rutilante de la casa de los Borbones, y punto final. Una estrella que esta semana visitará la Real Casa de la Moneda, el escenario de la serie de Netflix, La Casa de Papel. ¿Volverá a hacer un papelón y seguirá asediando a su suegra?