El rey emérito se ha quedado sin planes de cara a septiembre, y es que uno de los acontecimientos señalados en su calendario se ha cancelado. Juan Carlos I era uno de los invitados destacados de la boda de la hija de Miguel Arias, el propietario de su restaurante preferido de Mallorca.

En el restaurante Flanigan, de hecho, la familia real ha celebrado más de una cena veraniega. El verano pasado fue la última vez que la familia real se dejó ver en Mallorca al lado del rey Juan Carlos, y en aquella ocasión también fue aquel local con vistas al puerto a donde fueron. 

REY MALLORCA EFE

flanigan restaurant  pàgina web

Flanigan.es

Y su director, confidente del Rey emérito, le ha invitado a una boda que habría congregado gran parte de la jet-set... de haberse celebrado.

Juan Carlos I y Miguel Arias GTRES

Sara Arias y Lucas Toda ya habían enviado las invitaciones a sus 400 invitados, con el vestido de novia encargado, las flores, el catering, la casa mallorquina donde lo iban a celebrar... Pero nada de eso sirve ya, al confirmarse que han suspendido la ceremonia. Menos de un mes antes de la boda Vanitatis ha asegurado que ha quedado cancelada. Y es que la pareja se habría dado cuenta de que no estaban seguros de que el matrimonio durara de por vida.

Una marcha atrás de la que no se sabe nada más, al no haberse comunicado un cambio de fecha.