Juan Carlos I ha sido noticias en los últimos meses porque él mismo ha querido ponerse en el foco mediático para conseguir su objetivo. Ha sido un claro desafío a Felipe VI. Nunca habría sido capaz de hacer daño al reinado de su hijo ni al futuro de su nieta, pero no le ha quedado otra alternativa. Este mes se han cumplido cinco años desde que el emérito vive en Abu Dabi en el exilio. Una de las mayores humillaciones a las que se le ha sometido. Es una deshonra, pero no le quedó más remedio que aceptar por la situación en aquella época, jugaba en desventaja. Decidió demandar a Miguel Ángel Revilla por vulnerar su honor al recibir la negativa del monarca de instalarse en España o en un país más cercano. Sabe que el político es un gran altavoz y por ello le demandó, para hacer ruido. La única forma de silenciar este asunto era dejando al padre de las infantas Elena y Cristina abandonar los Emiratos Árabes.

Juan Carlos I y Pedro Sánchez
Juan Carlos I y Pedro Sánchez

En los últimos meses se vio a Juan Carlos I acompañado de la infanta Elena y otros amigos por Lisboa. El emérito había visto varias mansiones en la zona de Cascais y Estoril, donde viviría en la actualidad. Se instaló a finales de julio y ahora mismo le acompañan gran parte de su familia. Será difícil volver en algún momento a Madrid, casi imposible, pero por lo menos ahora está a una hora en avión de la capital y a unos minutos en coche de la frontera. Los médicos ya le recomendaron que no hiciese viajes tan largos y no tenía intenciones de quedarse solo en Abu Dabi, sin su familia y amigos. Sabe perfectamente que es muy mayor, 87 años, y tiene serios problemas de movilidad y otras afecciones, su final está cada vez más cerca y no quiere morir a miles de kilómetros de su familia y su casa, eso sería una gran deshonra, también para Felipe VI.

Juan Carlos I se instala en Portugal de forma definitiva 

Las infantas Elena y Cristina y sus nietos no tendrán que hacer más de 8 horas de avión para ver a su abuelo. Ahora lo tienen mucho más cerca y es una noticia que toda la familia ha recibido con los brazos abiertos. Incluso Felipe VI podría visitar a su padre más a menudo y mejorar la relación entre ambos. Curiosamente la infanta Sofía se trasladará la primera semana de septiembre a Lisboa para empezar sus estudios universitarios, muy cerca de su abuelo.

Juan Carlos I no ha comprado esta mansión porque no quiere dejar en herencia propiedades, solo dinero, de esta forma los trámites serán mucho más ágiles. Está alquilado y toda la familia tiene un nuevo lugar para veranear o pasar varios fines de semana.

Juan Carlos I en Sanxenxo, mayo 2025 / EFE
Juan Carlos I en Sanxenxo, mayo 2025 / EFE