Juan Carlos de Borbón y Borbón pasará las navidades muy muy lejos de España. En la película de Shrek dirían en el muy muy lejano. Mientras toda la Familia Real las celebrará en Zarzuela, JuanCar se comerá el pavo, las uvas y la escudella y carn d'olla con sus sirvientes en los Emiratos Árabes Unidos. Su regreso a territorio español está más que descartado. Tal y como revela Vanitatis, se sabe el motivo por el que es casi 100% seguro que 'El Campechano' no pisará España, al menos, hasta pasadas las Navidades.
Y todo viene por un viaje de Elena y Cristina, las hijas del rey, a tierras árabes. Según relata Vanitatis, fuentes ocultas -pero solventes- les han informado de que las hermanas de Felipe VI estuvieron en el pasado puente de la Purísima visitando a su padre. Mientras en Zarzuela se celebraba el día de la Inmaculada Concepción y el día de la Constitución en una especie de macropuente que algunos tildaron de acueducto, Cristina desde Barcelona y Elena desde Madrid acudían a la visita de Juan Carlos I. El emérito sigue envuelto en un secretismo absoluto. Es un quiero y no puedo. Quiere volver a España, pero su hijo no le deja.
Su actitud, el detonante
La última vez que JuanCar pisó España fue el pasado mes de mayo con su visita a Sanxenxo (Galicia). La actitud chulesca, de "yo no tengo culpa de nada" y algunas de las declaraciones que hizo a la prensa podrían haber sido el motivo por el que Don Felipe le haya puesto la cruz definitivamente. Mientras las infantas piensan que el emérito se merece una segunda oportunidad, Felipe prefiere no tener nuevos culebrones que puedan afectar a la buena salud de la que goza actualmente la corona española, con un Felipe y una Letizia afianzados en el trono y con una Leonor a menos de un año de cumplir la mayoría de edad. Juan Carlos I ahora no pinta nada: solo sería carne de meme para algunos, y más si mantiene la actitud de su última visita. Prefieren no jugársela.
Cristina, una trotamundos
Si hay alguien de la familia del Rey que sea una trotamundos, esta es Cristina de Borbón. La aún mujer de Iñaki Urdangarin empezó el año con el pie cambiado, pero se ha ido recuperando, hasta el punto de acabar el año viajando más que el propio Gulliver de dibujos animados. Mozambique, la India, Perú, Emiratos Árabes... y todo eso combinándolo con su vida en España, sus visitas a Vitoria y sus esporádicos encuentros con sus hijos en Londres y en Suiza, donde estudian Miguel e Irene respectivamente. ¿Hará un último viaje como acto de amor hacia su padre para comerse las uvas y la sopa de pescado con él en el Lejano Oriente? Porque volver Juan Carlos, querida, no volverá...
