La infanta Cristina ha vivido muchos años fuera de casa. Es la primera de los hijos de la reina Sofía que tomó la decisión de alejarse de Zarzuela, pero también de Madrid. Mientras que finalmente la infanta Elena se asentó en la capital de España, la ex de Iñaki Urdangarin optó por Barcelona, donde tenía grandes amistades. Allí se enamoró por primera vez hasta que finalmente conoció al padre de sus hijos. Prácticamente ha hecho toda su vida en la capital catalana, por este motivo no es extraño que finalmente haya decidido comprarse un piso donde empezó su relación con el exjugador de balonmano. Allí vive su hijo Pablo Urdangarin.

Ahora se sabe que la infanta Cristina se marchó de casa porque nunca se sintió querida por sus padres, especialmente por la reina Sofía. Era la del medio. La infanta Elena era la favorita por ser la primera, y tenía privilegios por ello, cuando llegó Felipe VI aún fue más olvidada porque el entonces príncipe era el único varón, el más pequeño y el futuro rey de España. Estuvo muy mimado por sus padres, especialmente por la emérita. Siempre ha sido su ojo derecho.
La infanta Cristina tuvo celos de Felipe VI y no se sintió querida por la reina Sofía, por este motivo se marchó a vivir a Barcelona
La infanta Cristina acudió en su juventud a terapia para afrontar este problema que siempre la había atormentado. Ha hecho mella en su forma de relacionarse con los demás y en su papel de madre con sus cuatro hijos. Para ella, la emérita ha sido una madre ausente en su infancia y adolescencia. Han estado mucho tiempo distanciadas.
No obstante, cuando estalló el caso Nóos y la expulsaron de la corona, incluso Iñaki acabó entre rejas y ella se marchó a Ginebra con sus hijos, la reina Sofía no se separó ni un solo momento de sus nietos y de su hija. Fue el mayor apoyo en esa situación tan difícil. En ese momento se reconciliaron y le pidió perdón por ser una madre ausente.
Ahora mismo la infanta Cristina es el apoyo más importante de la reina Sofía. Ella será quien se quede con la emérita en Marivent unas semanas después de la marcha de Felipe VI y Letizia para que pueda disfrutar más del palacio.
