Froilán pasa más tiempo en España que en Abu Dabi. Han pasado ya dos años desde que Felipe VI y Letizia obligaron a la infanta Elena a tomar una decisión con su polémico hijo y esta decidió llevarle a los Emiratos Árabes con Juan Carlos I. Sabía que con su abuelo no se encontraría solo y estaría acompañado. Empezó a trabajar en una empresa petrolera gracias a los contactos del emérito. Era uno de los becarios, pero cobraba 7.500 euros al mes, vivía en un piso de alquiler de 500 metros cuadrados. Pocos meses después se terminó su contrato y no le renovaron, así que aprovechó para acompañar al padre de su madre a España. Poco a poco se dejaba ver por Madrid y otras ciudades, como era de esperar de fiesta en fiesta. Nunca se ha confirmado que viva de forma oficial en España, y recientemente salió a la luz que le habían ofrecido un trabajo en la misma petrolera como Junior.
Este verano ha sido muy intenso para Froilán. Como es costumbre ya, una vez más ha pasado unos días en Marbella y en Ibiza, donde se le relacionó con la concursante de MasterChef Miri Pérez-Cabrero. Para rematar estos meses de descanso, el hermano de Victoria Federica se ha instalado en Asturias y no precisamente para hacer turismo ni por su tranquilidad y bajas temperaturas en esta época del año, sino para asistir al festival musical Aquasella, que este año ha batido un nuevo récord de asistentes con más de 80.000. Este festival ha traído también malas noticias que no gustan a los reyes. Se han puesto 503 multas por posesión de drogas y seis detenidos, tres de ellos por violencia de género.
Froilán vive uno de los veranos más locos y polémicos
Okdiario ha detallado que Froilán ha cumplido con la palabra a los reyes, ha vuelto a España intentando pasar desapercibido en la medida de lo posible. No tuvo ningún tipo de privilegio en el festival ni tampoco compró una entrada VIP, fue uno más. También tuvo tiempo para el turismo. Durmió en el hotel de Parres y visitó Cangas de Onís, donde almorzó.
Froilán lleva gastados más de 60.000 euros en fiestas, hoteles, comidas y muchos caprichos. El hermano de Victoria Federica llegó a Asturias desde Ibiza, donde también estuvo de fiesta en fiesta y conoció a Miri. Tuvieron una cita en el restaurante La Escollera.
Es en la isla pitiusa donde una mujer aseguró que Froilán se pasó de la raya. "Me topé con una situación bastante incómoda. Me sentí bastante intimidada. Estaba alucinando, no entendía a qué venía todo esto", contó en Tardear. "Froilán actuaba como si fuera el dueño de la discoteca, literalmente. Hablaba con una prepotencia... Me dijo que, si quería una foto con él, se lo dijera". Ella se negó y, según cuenta, Froilán se sintió muy dolido: "Me empezó a decir que era una maleducada, que era grosera. Me empezó a mirar con una cara súperdesafiante".