El clima en la Casa Real está tenso. La publicación de las memorias de Juan Carlos I, tituladas Reconciliación, ha encendido las alarmas. El libro aún no ha salido, pero no deja de generar polémicas.
El emérito repasa décadas de historia, decisiones políticas y asuntos familiares. Pero lo que preocupa a Felipe VI no son los logros, sino los escándalos que podrían salir a la luz. Donaciones, cuentas millonarias y relaciones personales delicadas son capítulos que amenazan la imagen de la Corona.
Ahora ha surgido un nuevo problema que, aunque no tiene que ver directamente con la biografía, sí mantiene cierta relación. Porque el nuevo asunto no tiene que ver con el libro, sino con que este podría convertirse en una serie de Netflix.

Saltan nuevas alarmas en Zarzuela
La plataforma de vídeo bajo demanda habría mostrado interés en adaptar la vida de Juan Carlos a la pantalla, según público The Objective. Una serie al estilo de The Crown, con todos los episodios polémicos incluidos. Según fuentes cercanas, la plataforma estaba dispuesta a pagar millones por los derechos.
Sin embargo, no parece que el asunto vaya a tener demasiado recorrido. Por la cuenta que le trae al emérito. Felipe VI ha reaccionado de forma inmediata y firme. Reunió a su padre y le lanzó una advertencia clara: si cerraba cualquier acuerdo, no volvería a pisar España. Una amenaza determinante para un Juan Carlos cuyo máximo deseo pasa por regresar a su país de forma permanente.
Felipe VI considera que un proyecto global podría destruir la imagen de la monarquía. Mostrar relaciones privadas, finanzas y contactos internacionales en una serie de televisión sería un riesgo que la Corona no puede asumir. La defensa de la credibilidad y la estabilidad es su prioridad.

Tira y afloja entre Felipe VI y Juan Carlos I
Un nuevo aumento de tensión que se suma a los episodios acontecidos en los últimos meses. Aquellos relacionados con las denuncias de Juan Carlos I a Corinna Larsenn y a Miguel Ángel Revilla. El emérito retiró la primera, pero no la segunda. Y ello provocó una inmensa indignación en Felipe. Era la primera vez que un rey se querellaba contra un civil. Y aunque el monarca ha insistido a el emérito para que de un paso atrás, Juan Carlos sigue firme en su posición.
Para el ex monarca, se trata de una medida de presión a su hijo, como la publicación de su biografía, para que le deje volver a España. Si Felipe cede, Juan Carlos dará marcha atrás. Pero de momento la jugada no le ha salido como esperaba. Todo lo contrario. Tiene todas las de perder. Porque Felipe no piensa ceder en nada mientras Juan Carlos no vuelva a un perfil bajo. Y eso no pasará con denuncias, biografías o negociaciones con Netflix.