Durante décadas, Mallorca fue sinónimo de verano real. Playa, Marivent, posados familiares. Y siempre, en todas las fotos, la reina Sofía. Pero este año algo ha cambiado. Por primera vez, ella no tenía pensado ir.
No se trataba de salud, ni de deberes oficiales. Era algo más íntimo. Más humano. La reina emérita había tomado una decisión silenciosa: quedarse en casa. No por ella. Por su hermana, la inseparable Irene de Grecia, conocida por todos como la tía Pecu.

Irene de Grecia, motivo de máxima preocupación para la reina Sofía
Desde hace meses, Irene ya no es la misma. Apenas sale de la cama. Apenas reconoce rostros. Sofía lo sabe, pero aun así no deja de estar a su lado. Su compañera de vida, la sombra discreta en Zarzuela, se apaga poco a poco. Y ella no quiere mirar hacia otro lado. No ahora.
A su edad de 86 años. Sofía ha pasado de reina a cuidadora. No hay trono ni acto institucional que valga más para ella en este momento. Su prioridad es una mujer frágil que hace años venció un cáncer y que ahora lucha contra el olvido. Dicen que podría ser Alzheimer. Pero nadie lo ha confirmado.
A todo esto, el rey Felipe lo ve desde otro ángulo. Sabe que cada gesto en la familia real tiene lectura pública. Por eso, aunque entendía el retiro de su madre, le pidió algo muy concreto: que hiciera las maletas y viniera, aunque solo fuera por unas horas.
Finalmente, la reina Sofía estará en Marivent
No era una orden. Pero sí una petición directa. Marivent acoge hoy una recepción oficial con autoridades y prensa internacional. Y la presencia de Sofía, aunque breve, es clave. Un guiño a la tradición y una señal de que todo sigue funcionando.

Ella dudó. Ya le habían pedido desde Zarzuela que fuera. Respondió que solo lo haría si su hijo lo pedía personalmente. Y lo hizo. Así que viajó el domingo por la tarde, en silencio, sin aspavientos.
Hoy, lunes 4 de agosto, la reina Sofía estará allí. A su manera. Discreta y elegante. Una aparición corta, pero poderosa. Porque, incluso cuando la tristeza aprieta, la monarquía necesita sus símbolos. Y ella sigue siendo uno de los más fuertes.