El rey Carlos III ha actuado con mano firme contra su hermano, Andrés Mountbatten Windsor. El exduque de York ha sido despojado de todos sus honores y tratamientos reales. Sin embargo, ha decidido preservar los títulos de sus hijas, las princesas Beatriz y Eugenia de York. Sus hijas conservarán el derecho a ser tratadas como “Su Alteza Real”.

Hace solo unas semanas, Carlos III retiró oficialmente a Andrés los títulos de duque de York y de príncipe, culminando un proceso iniciado tras su vinculación con el pedófilo Jeffrey Epstein y las revelaciones de Virginia Giuffre, su presunta víctima. En cuestión de días, el hijo favorito de la reina Isabel II pasó de ocupar un lugar destacado en la familia a convertirse en un miembro apartado, reducido a un papel meramente simbólico dentro de la Casa Real.

Príncipe Andrés   GTRES
Príncipe Andrés GTRES

Las hijas del ya ex príncipe Andrés conservan sus títulos

Sin embargo, el monarca británico decidió no extender el castigo a sus sobrinas. Beatriz y Eugenia mantendrán sus títulos y su tratamiento de Alteza Real, conforme a lo estipulado en la patente real de 1917 firmada por el rey Jorge V, abuelo de Isabel II. Este documento, aún vigente, determina quién puede ostentar los títulos de príncipe o princesa, y deja claro que solo el monarca reinante puede revocar o modificar ese estatus mediante nuevas disposiciones.

El texto establece que el tratamiento de Alteza Real corresponde a los hijos del soberano, a los nietos por línea masculina y al primogénito del heredero del Príncipe de Gales. Por tanto, Beatriz y Eugenia, nietas del difunto monarca a través del príncipe Andrés, cumplen los requisitos para mantener su rango, independientemente de la situación de su padre. Su posición, de momento, permanece inalterable: Beatriz ocupa el noveno lugar en la línea de sucesión, mientras que Eugenia se sitúa en el duodécimo. Cabe decir que Andrés conserva el octavo lugar mientras el Parlamento no decida lo contrario.

Eugenia y Beatriz de York / GTRES
Eugenia y Beatriz de York / GTRES

El ducado podría ser para el hijo del príncipe Guillermo

Esto no significa que las princesas desempeñen funciones oficiales dentro de la monarquía. En los últimos años, ambas han llevado vidas más discretas, centradas en sus familias y en proyectos personales. Ninguna de ellas ni sus maridos, Jack Brooksbank y Edoardo Mapelli Mozzi, han recibido títulos nobiliarios tras sus matrimonios, un indicio claro de la intención del rey de mantener un núcleo real más reducido.

Mientras tanto, el título de duque de York queda en un limbo legal. Aunque Andrés ha dejado de utilizarlo públicamente, sigue ostentándolo de manera formal hasta que el Parlamento británico decida lo contrario. Retirarle ese ducado requeriría una ley específica, algo poco habitual en la historia reciente del Reino Unido. Si finalmente se revocara, el título volvería a la Corona, y Carlos III podría optar por no volver a otorgarlo o reservarlo para un futuro heredero.

Entre los escenarios más comentados figura la posibilidad de que el título pase, en un futuro lejano, al príncipe Louis, el segundo hijo del príncipe Guillermo. Por ahora, lo único cierto es que, pese a la caída de su padre, Beatriz y Eugenia han sobrevivido al escándalo. Gracias a la decisión del monarca, conservan su estatus real, su tratamiento de princesas y, sobre todo, su dignidad dentro de una familia que atraviesa uno de los momentos más delicados de su historia.