Después de tantas polémicas, Casa Real británica decide retirar todos los títulos y honores reales al príncipe Andrés, el hermano pequeño del rey Carlos III. Este hecho ya se ha denominado como “la guerra de los Windsor”. La medida definitiva la tomó el monarca, aunque tuvo consenso dentro de la familia con una gran influencia de su esposa, la reina Camila, incluso de la princesa de Gales, Kate Middleton. Con la muerte de la reina Isabel II, Andrés era su favorito, Carlos III sentencia a su hermano para evitar que dañe a la corona británica. El príncipe, o ahora solo Andrés, empieza una nueva vida en el exilio, sin títulos y sin apoyo de la Casa Real.
El pasado jueves la Casa Real británica publicó la noticia sobre esta decisión que muestra una nueva era dentro de la corona. "Su Majestad ha iniciado un proceso formal para retirar el estilo, títulos y honores del príncipe Andrés", y que a partir de ese momento sería conocido únicamente como Andrew Mountbatten-Windsor. Además, tal y como reza en el escrito, también perderá el contrato de arrendamiento sobre el Royal Lodge, deberá irse a otra vivienda.
Casa Real se desmarca completamente de la polémica del príncipe Andrés
La Casa Real británica se desvincula por completo del hermano del rey Carlos III. "Sus Majestades desean dejar claro que sus pensamientos y simpatías más sinceras están, y seguirán estando, con las víctimas y supervivientes de cualquier forma de abuso.”, dice una de las frases más contundentes del comunicado. Es la primera vez que se pronuncian en términos tan explícitos, siempre han sido muy reacios, pero no quieren que quede impune. Es una decisión que pedían desde hace años muchos británicos.
Según varios medios de comunicación especializados, en el comunicado que es totalmente público, “se nota un toque femenino” dando a entender que podría haber estado redactado por la reina Camilla y la princesa Kate. El príncipe Guillermo también ha estado de acuerdo en todo momento con esta decisión. "Camilla y Catherine habrán insistido, y Guillermo no querría heredar ese problema", señaló la fuente, que añadió: "Fue un mensaje fuerte, y me sentí orgulloso al escucharlo.”
De hecho, Camilla siempre ha apoyado a víctimas de violencia de género, agresiones sexuales y violaciones. La reina consorte ha demostrado mayor sensibilidad social. Carlos III no deseaba tomar una medida tan drástica, pero ha sido su familia quien le ha presionado para ello.
