El passat febrer, i després de set anys ininterromputs, Mediaset baixava la persiana a un dels seus molts programes de safareig. Cazamariposas s'acabava, i amb ell, la feina d'una presentadora catalana, Núria Marín.
Un moment molt dur a nivell professional que va venir acompanyat d'un sotrac personal complicadíssim del qual ara n'ha parlat en un podcast. Marín ha revelat que li van notar un bony al pit després del darrer programa: “Fue especialmente duro. No he contado esto nunca, pero yo el día que se acaba el ‘Caza’, después ese momento tan de catarsis me iba a urgencias porque me había notado un bulto en el pecho y entonces estaba asustada porque me tenía que ir a Madrid, pero no sabía lo que me iban a encontrar”.
Un comiat de programa, un adéu als companys, una petita festa d'autohomenatge que per ella va ser agredolça, ja que no es va poder acomiadar dels companys d'equip. “Cuando todo el mundo se quedaba brindando yo me fui a urgencias a hacerme una mamografía y tuve una tarde muy complicada porque había un bulto y me tuvieron que hacer una biopsia”.
Després d'un dia horrorós, finalment va poder respirar alleugerida, quan li van donar els resultats i tot va quedar en un ensurt: “Hasta después de una semana yo no sabía lo que tenía. Estaba todo el mundo escribiéndome, gente que había estado en ‘Cazamariposas’ y yo estaba en urgencias y explicando a la gente lo que le estaba pasando porque tampoco quería asustar a nadie y jolín. Fue como ‘¿En serio tiene que pasar todo hoy?’ Y al final no fue nada”. Celebrem que aquell dia funest hagi quedat enrere.