Joan Carles continua en parador desconegut. Més d’una setmana després que el rei emèrit abandonés Espanya, acorralat pels seus propis escàndols de corrupció, el govern espanyol i la Casa Reial encara fan gala de la seva opacitat i es neguen a revelar on és l’exmonarca. En les últimes hores, el ministre Fernando Grande-Marlaska ha confessat a més que la seva seguretat a l’estranger es finança amb diners públics. Una situació que afegeix més llenya al foc, quan la monarquia ja és al punt de mira de bona part dels ciutadans, indignats amb els esdeveniments d’aquest estiu. Les crítiques pel paperot de la família reial no s’aturen, fins i tot per part d’alguns aristòcrates. I és que al malestar per la marxa de Joan Carles, ara s’hi suma la veu de Mercedes Milà.

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Una setmana després de la fugida de Joan Carles, la Casa Reial es nega a revelar on és | GTRES

La periodista catalana va néixer al si d’una família de la noblesa barcelonina i profundament monàrquica, malgrat que ella no se’n considera. Tot i això, afirma que no pot deixar de sentir llàstima pel final de Joan Carles. “Me causa dolor que Juan Carlos haya terminado, momentáneamente, viviendo fuera de su país”, escriu al seu Instagram. Entre monarquia o república, Mercedes Milà ha assegurat en més d’una ocasió que tria la segona. Potser per no haver de fer-se preguntes com aquesta: “¿Qué puede hacer que un ser humano que tiene su vida resuelta (…) qué puede hacer que el dinero y el sexo le hagan perder el sentido de su existencia y acabe convirtiéndose en otro ser que defrauda a todo su país?”. Per a la presentadora, la decisió d’abandonar Espanya és “brutal” i “casi imperdonable”. I afegeix també que els espanyols que no mereixen això d’un excap de l’Estat: “No tiene derecho”, sentencia.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Para mí el Rey siempre fue Don Juan III. Mi padre, profundamente monárquico, así lo consideraba y nunca aceptó la monarquía de su hijo traída por el general Franco. Solo consideró a Juan Carlos de Borbón Rey de España cuando su padre, el Conde de Barcelona, le cedió sus derechos históricos y así, aquel Príncipe de España del franquismo, pasó a serlo de Asturias y pudo reinar con todas las consecuencias. Yo no soy monárquica. Entre monárquica y republicana, me siento republicana pero no dejo de llevar en mi ADN una fidelidad de muchas generaciones a esa forma de estado. Aunque mirando con detenimiento esta foto que os pongo hoy, me causa dolor que su hijo, el que fue nuestro Rey Juan Carlos, haya terminado, momentáneamente, viviendo fuera de nuestro país, de su país. ¿Qué puede hacer que un ser humano que tiene su vida resuelta, que ha servido a su patria en todas las facetas posibles, que la defendió del golpe de estado que podía haber acabado con nuestra democracia tan difícilmente conseguida, qué puede hacer que el dinero y el sexo le hagan perder el sentido de su existencia y acabe convirtiéndose en otro ser que defrauda a todo su país? No sabemos qué dirán los jueces y los fiscales pero sí sabemos que el Rey Emérito (nombre desagradable donde los haya) ha decidido abandonar a su hijo, a su familia y vivir lejos de España. Para mí es una decisión brutal, casi imperdonable, muy dolorosa por lo que puede tener detrás. Y digo imperdonable porque era nuestro Jefe de Estado, la autoridad que todos habíamos decidido acatar, el ciudadano bien pagado, querido y respetado. Los españoles no lo merecíamos, no tiene derecho. Los Reyes actuales, Felipe y Letizia, deben estar viviendo momentos muy difíciles pero necesito decir que agradezco su actitud, su valor y su defensa de la honradez por encima de los sentimientos de compasión que un hijo pueda tener por su padre. No me digáis que no es increíble la vida inesperada que muestra la segunda fotografía. Para mí esta imagen es profundamente dolorosa. A este padre se le tiene que caer la cara de vergüenza. 😔

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Lloa Felip i Letícia per la seva “actitud, valor y defensa de la honradez” en aquests moments, abans de fustigar Joan Carles definitivament: “Se le tiene que caer la cara de vergüenza”.