Aquest dijous s'estrena Legado en los huesos, la segona part de la coneguda com 'Trilogia del Baztán' basada en els best sellers de Dolores Redondo. L'actriu Marta Etura interpreta a la inspectora Amaia Salazar, que mira de descobrir casos truculents en un entorn on es respira maldat i creences en éssers malignes.

Però Marta Etura també veu el mal en segons quins polítics i actituds de la societat. La que va viure de jove, al País Basc, sent filla d'empresari amenaçat: "Fue terrible, terrible. Un miedo permanente. Mucha gente ahora pasa por encima de aquello y me da mucha pena. No saben lo que fue". Allò la va fer participar activament en el rebuig a ETA, tot i que li valgués l'etiqueta de 'juventudes del PP': "Yo no he sido de ningún partido, sólo era una ciudadana de una región con un conflicto enorme y una violencia extrema que se posicionó a favor de la paz y el respeto. Era o piensas como yo o te mato, o pagas el impuesto revolucionario o te secuestro. Posicionarme en contra de ellos no me hace de derechas".

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Etura parla obertament de política en una entrevista pel diari El Mundo, i no es mossega la llengua a l'hora de definir noms com el d'Otegi: "No es normal que una persona que ha sido terrorista se presente a un cargo público". Tampoc estalvia crítiques al procés. El mitjà, faltaria més, li compara aquell País Basc de fa uns anys amb la Catalunya d'ara. I ella ho separa, però a mitges: "Son situaciones distintas, pero con una base igual. En mi adolescencia ETA mataba a alguien cada 15 días. He vivido muertes, secuestros... En Cataluña no hay ningún grupo terrorista, pero sí encuentro algo muy negativo en común: en el momento en que la independencia parte a la ciudadanía en conmigo o contra mí, es un conflicto sin solución asegurado y una faena para la sociedad de Cataluña y para todos los españoles". 

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L'actriu compra el discurs unionista de molts que no veuen la realitat catalana ("Esto es paralelo a lo que pasó en el País Vasco. Se partió la sociedad, se enfrentó, se olvidó la convivencia y nadie se fiaba del otro"). I el diari s'hi abona amb una pregunta lamentable: "¿Eso se cura?", com si fos una grip passatgera. Resposta: "No sé. Si lo hace, tarda muchísimo. Yo me pregunto: ¿qué ganan siendo independientes? Esa es la pregunta que tienen que hacerse y me parece que en este ambiente ya nadie se hace". Sí que se la fan sí, Marta. Però la resposta és ben diferent de la teva. Una Etura que només hi veu problemes: "Un país como España, en el que conviven tantos paisajes, debería ser capaz de lograr que conviviesen las ideologías y no sucediese otra vez lo que pasó en mi tierra. Se creó una atmósfera de que España era nuestro enemigo. Y no, no lo es. ¿Por qué?".

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L'actriu guanyadora d'un Goya per Celda 211 es pregunta algun 'per què?'. Els que també es fan aquesta pregunta són els presos polítics que estaran en una cel·la molts anys per voler votar.